El presidente Alberto Fernández rechazó este martes las críticas ante la decisión del Gobierno nacional de avanzar con la intervención sobre el Grupo Vicentín y aclaró que "no está en la cabeza de ninguno de nosotros andar expropiando empresas".
"Todo el mundo tiene que entender que lo de Vicentin es una medida absolutamente excepcional. Que no nos estamos quedando con una empresa próspera, que la salvamos por la incidencia que tiene en la economía nacional, en el mercado de granos. Sólo por eso", remarcó el Jefe de Estado.
El lunes a la noche, la coalición opositora Juntos por el Cambio (JxC) advirtió que la intervención y eventual expropiación del Grupo Vicentin anunciada por el presidente Fernández es "ilegal, inconstitucional y va a terminar costando miles de millones de dólares".
En un comunicado firmado por el PRO, la UCR y la Coalición Cívica, JxC señaló que la medida "desautoriza al Congreso y el Poder Judicial, da un primer paso en el camino para estatizar el mercado agropecuario, repite experiencias anteriores que terminaron costando muy caras a los argentinos, como las expropiaciones de YPF y Ciccone, y confirma que las amenazas recientes al final eran compartidas por el resto del frente oficialista".