El muy mal estado del campo de juego de Boca Juniors, que será escenario de los partidos de mañana frente a Deportivo Cali y del próximo domingo ante River Plate, genera preocupación y no podrá ser mejorado de manera sustancial.
Las imágenes que se mostraron hoy por la TV muestran un peor estado que el que se vio el sábado ante Aldosivi, especialmente en el sector lateral que da a los palcos.
Se espera que cese la lluvia para volcar arena en toda la superficie y así lograr una mayor absorción del agua y un mejor asentamiento.
La Bombonera ya se observó muy deficiente el pasado sábado, en el partido que Boca le ganó a Aldosivi, ya que estaba muy barrosa, en particular sobre el lateral que da a los palcos de la calle Del Valle Iberlucea, más aún en el sector norte.
Se hizo notorio que la pelota no circulaba con normalidad, a menudo quedaba frenada y se dificultaba la movilidad de los jugadores, que no tenían estabilidad.
La continuidad de las lluvias imposibilitó que, desde el sábado hasta hoy, pudiera trabajarse en profundidad y sólo se quitó algo del agua acumulada.
La lona que el club adquirió hace poco tiempo y que fue utilizada la semana pasada no volvió a colocarse, ya que cuando se acumula mucha agua sobre ella los efectos sobre el césped son negativos.
El drenaje del sector de los palcos no es el ideal por la altura de las napas de agua subyacentes y por otra parte, normalmente es poca la luz solar, por lo que Boca dispone de lámparas para dar calor al césped.
Si mañana, como se anuncia, cesa la lluvia, se espera que con arena pueda afirmarse la zona, aunque puede adelantarse que la cancha distará de estar en estado óptimo para el juego con Cali y aún para el posterior con River.
