A la propuesta del nuevo capitán de la nave (Mauricio Larriera) le faltan horas de vuelo. Mucho más allá del resultado en el amistoso de ayer frente a Desamparados (1-0), Godoy Cruz sigue sin convencer. A una semana del debut en la Superliga, falta rodaje, sistematizar movimientos y el entrenador es totalmente consciente de ello cuando responde afirmativamente a la consulta de si a su equipo le faltó disputar mayor cantidad de encuentros de preparación.
Sobre la base de que un partido por los puntos tiene otro tipo de condimentos, a esta vieja-nueva versión del Expreso le falta todavía aceitar movimientos, leer en qué momentos acelerar y en cuáles bajar el ritmo. Su DT, un fundamentalista de lo estético, trabaja contrarreloj para meter a sus jugadores un arsenal de variantes para lastimar al rival en ofensiva. Sin embargo, todavía no se vieron en plenitud porque justamente hace falta algo que en el fútbol no se consigue a la vuelta de la esquina: rodaje, puesta en escena.
Durante el primer tiempo (se jugaron dos de 40'), el Tomba fue capaz de sostener durante mayor cantidad de tiempo la posesión de balón. Eso sí, ante un adversario que ejerció una presión tan alta como asfixiante en casi todos los rincones, Godoy Cruz careció de la profundidad necesaria como para exigir a Perelman. El Tomba llegó solamente con un remate de Javier Correa que contuvo sin problemas el arquero de Sportivo.
En el complemento bajó la intensidad de la presión del adversario y hubo algunos movimientos tácticos por parte de Larriera que derivaron en la rápida apertura del marcador. El equipo se paró unos metros más adelante, Garro hizo un enroque de extremo con “Felucho” Rodríguez y Gastón Giménez comenzó a tener un contacto más asiduo con el balón.
De hecho, tras una apertura del zurdo formoseño hacia la izquierda para Garro que Juanfi decidió profundizar con un desborde y centro atrás, llegó el único tanto del partido. El uruguayo Rodríguez sólo tuvo que empujarla con el arco vacío. Gol y a otra cosa.
Los minutos posteriores tuvieron un leve dominio local, aunque Desamparados se animó a discutirle la posesión a Godoy Cruz en el mediocampo, donde Andrés Rotundo y “Peca” Jofré hacían pata ancha al mismo tiempo que Antuña les pedía más juego. Un remate de Pietkiewicz desde afuera que Burián mandó al córner fue la acción más peligrosa del Víbora.
El partido, típico de pretemporada, entró en un pozo y ni los ingresos de Silva y De Faría sirvieron para dar otra fisonomía a la conducción ofensiva de un Godoy Cruz que todavía anda como pan que no se amasa y harina que no se vende. A la propuesta de Larriera, todavía le falta un golpecito de horno importante. Lo más importante de todo es que conservó la base de la temporada pasada y, si logra aceitar los engranajes como pretende su DT, estará en condiciones de dar pelea.
Mauricio Larriera - DT de Godoy Cruz: "Me preocupa generar situaciones a través de un camino"
Una vez finalizados los amistosos, Mauricio Larriera dialogó con la prensa: “El balance es positivo, nos encontramos con un equipo que presionó y vimos cosas importantes de lo que venimos trabajando”. Se lo mostró contento al DT uruguayo por la preparación previa al comienzo de la competición local.
En los partidos ante San Lorenzo, Gremio y Desamparados, el Tomba solamente convirtió dos goles, a lo que el técnico respondió: “No me preocupa; lo que me ocupa es generar situaciones a través de un camino. El rendimiento del equipo y el funcionamiento llevan tiempo y esta preparación fue atípica”. Para finalizar, el DT hizo hincapié sobre Atlético Tucumán: “Es un rival duro, tiene un buen plantel con muchos jugadores que llegaron, cuya gran mayoría conozco”.
Varios se mostraron
En el duelo que tuvo a los suplentes de Godoy Cruz y Desamparados (jugaron dos tiempos de 30’) no hubo emociones. Fue cero a cero.
Más allá del resultado, el Tomba lució más compacto y tuvo prácticamente el control del partido.
El Expreso fue superior, pero a esa supremacía le faltó cristalizarla con profundidad y goles. La hora de juego sirvió para que Mauricio Larriera y sus colaboradores vieran en acción a los últimos refuerzos: el delantero Victorio Ramis y el lateral derecho Cristian Báez.
Sin embargo, los que mejor se mostraron fueron el zurdo marcador central Tomás Cardona, quien llegó para reforzar al equipo, y el volante central Juan Andrada, quien se recuperó de una operación de ligamentos de su rodilla. Báez sólo jugó media hora (fue sustituido por Walter Serrano) y luego trabajó de manera diferenciada ya que debe ponerse a tono en lo físico.
Otros que ingresaron fueron el arquero Ramiro Martínez (uno de los seis refuerzos) y los juveniles Brayan Ayetz y Lucas Agüero.