El servicio de Otorrinolaringología del hospital Central realizó una novedosa cirugía para lo que es el sistema de salud pública. Un hombre de 34 años fue sometido a una faringoplastía de reposición con sutura barbada, una avanzada cirugía relacionada al tratamiento del ronquido y las apneas del sueño.
Además de lo positivo que significa para el sector público haber podido realizar esta inédita intervención, la importancia también radica en la patología. Es que al menos 5% de la población general la padece; con mayor prevalencia en hombres adultos.
"Los datos hablan de 5% de población, pero el porcentaje podría aumentar si se hiciesen las consultas correspondientes. El tema es que el ronquido muchas veces se naturaliza y el paciente no consulta. Pero no es sólo un ruido molesto por la noche. Trae aparejadas otras complicaciones; y si se trata la patología a tiempo puede hasta evitarse un infarto", destacó el doctor Fabricio Ianardi, uno de los especialistas del servicio de Otorrinolaringología del Central y que tuvo a su cargo la reciente cirugía. Participaron también las médicas Victoria Martínez y Carolina Morgani.
"La cirugía es bastante efectiva para mejorar la calidad de vida, pero tiene que ir acompañada de otros tratamientos también. La recuperación demanda 15 días y el paciente tiene que estar una noche internado", destacó Ianardi; quien resaltó que es una cirugía similar a la de extracción de amígdalas y que tiene su molestia, aunque mínima.
El paciente intervenido fue operado el miércoles, mientras que el jueves recibió el alta.
Un síntoma
La patología de ronquidos y apneas del sueño es prevalente en todas las edades, y cada grupo etáreo tiene sus complicaciones. En niños, por ejemplo, puede ocasionar deformaciones en la cara, ya que respira por la boca y no por la nariz; mientras que en los adultos puede acarrear problemas cardiovasculares, de respiración y un estado de cansancio y decaimiento durante todo el día.
"Es un síndrome muy frecuente en todos los grupos. Se da en aquellas personas a quienes, cuando duermen, se les cierran las vías aéreas. Hay pacientes a quienes se les cierran por 10 segundos, y son 10 segundos que están sin respirar. Esto genera complicaciones, sobresaltos; que llevan a que el cuerpo no descanse. Entonces, al no descansar bien (por más que haya dormido 8 horas la persona), durante el día esa persona tiene síntomas como dolores de cabeza, problemas de hipertensión. Y están todos relacionados a ese síndrome", sintetizó Ianardi.
Otro riesgo es que al estar los ronquidos naturalizados por muchas personas, la mayoría de las veces ni siquiera recurren a un especialista para consultas médicas. "La consulta siempre suele ser de la pareja o la familia de la persona que ronca. Y lo hacen más por la molestia de los ruidos que por una preocupación de salud", detalló el especialista.
Respecto a los causantes de los ronquidos y apneas, Ianardi explicó que hay un rango característico que involucra a hombres, pacientes con sobrepeso y con cuellos cortos -por ejemplo- entre la prevalencia más frecuente. No obstante, esto no quita que pueda haber también personas sin sobrepeso ni sedentarismo las presenten. En este caso, la relación puede estar dada por un factor genético.
"Habitualmente, quienes están tomando pastillas para dormir o quienes se acuestan después de haber bebido una considerable cantidad de bebidas alcohólicas son más propensos a roncar. Lo mismo ocurre cuando alguien se va a acostar relajado después de haber hecho actividad física. Son todas actividades que predisponen a la relajación muscular y que pueden derivar en ronquidos", resumió Ianardi. "Podemos roncar frecuentemente; eso no es preocupante. Pero sí lo es cuando ya se vuelve algo habitual", agregó.
La operación
En las personas que padecen estas patologías, el colapso suele darse generalmente a la altura de la orofaringe. Cuando ésta se cierra, puede hacerse de los costados o desde el centro. En el caso del paciente intervenido esta semana, con la cirugía se le dio tensión hacia los costados a las paredes de la faringe precisamente.
"La faringoplastía de reposición con sutura barbada es una técnica especial y una de las tantas faringoplastía que existen. Se puede hacer de forma ambulatoria y es muy importante que se haya hecho en un hospital público", destacó Ianardi, siempre con hincapié en la importancia de entender que no se trata simplemente de ruidos molestos por la noche.
La operación consiste en reposicionar los tejidos blandos de la vía aérea superior mediante hilos de tensión unidireccionales que, conjuntamente con el trabajo interdisciplinario de diferentes servicios del hospital, mejoran la calidad y sobrevida del paciente.
A nivel privado, la intervención no está protocolarizada aún.
