Romina imagina como sería su vida si no hubiera visto eso.
Eso la perturba, la lleva a limites de su propia existencia, como empujada por algo totalmente desconocido, que la dejan en el borde. No siempre son peligrosos.
A veces tienen que ver con eso borroso, que nubla, que no se entiende muy bien.
Aunque sabe que tiene que ver con eso, no lo puede parar.
No alcanza la mayoría de edad pero tiene grandes problemas con la familia que la alojó en el sur por haberse acostado con el esposo de la tía, que ella sabe, aunque lo quiere, que la usó.
Eso la empujo a hacerlo, pero igual, no quiere perder su cariño, o al menos eso cree ella.
Eso la asusta, la desconcierta, pero tampoco puede enfrentarlo, diríamos con la cabeza en alto, pero no, no puede, aunque lo desea.
Por que sabe que eso tiene que ver con ella, y con su madre, pero en definitiva con ella.
Casi que pasa desapercibido, para sí misma y para los demás, pero hay un punto, casi imperceptible que la reduce a reconocer que eso solo tiene que ver con ella.