Irlanda jugó un primer tiempo perfecto, sometió a los All Blacks con los forwards y puso incómodo al único seleccionado invicto en este año. Pero, en un final infartante, los hombres de negro sacaron a relucir su amor propio y dejaron en claro porqué son el mejor equipo del mundo.
Con el tiempo cumplido y tras una jugada de toda la cancha, Ryan Crotty marcó el try del empate y Aaron Cruden convirtió para el 24 a 22 del triunfo.
El encuentro tuvo todos los condimentos que se le pueden pedir a un partidazo, porque en la primera mitad el Trébol marcó tres tries con un alto nivel de juego y una contundencia admirable. Las dos primeras conquistas fueron consecuencia del juego asociado y de varias fases de ataque, donde backs y delanteros se entremezclaron para darle dinámica a los avances y lograr resultados fructíferos.
Nueva Zelanda lució confundido, y ese nerviosismo se le volvió en contra tras un error de manejo de Israel Dagg, la ovalada cayó en manos de Rob Kearney en su propio campo y, como una flecha, salió despedido hasta el ingoal rival, con una defensa a contramano que nada pudo hacer para frenarlo.
El primer síntoma de reacción maorí llegó a través de una genialidad de Aaron Cruden que con un toque sutil de zurda por detrás de la defensa, dejó solo a Julian Savea para marcar casi debajo de los palos.
El gran trabajo defensivo de Irlanda se mantuvo también en el complemento. Los All Blacks estuvieron incómodos con el juego, y así se reflejó en dos penales en los cuales optaron por buscar los palos con el pie de Aaron Cruden, en vez de jugar como suele hacer este equipo.
El try de Ben Franks y la posterior conversión lo dejaron a tiro, a falta de quince minutos. La jugada que podría haber cambiado la historia del encuentro, fue el penal accesible que Jonathan Sexton tuvo a falta de siete minutos, pero su envío salió pegado al primer palo y le dejó una única oportunidad de reacción a Nueva Zelanda.
Esa única chance fue aprovechada de manera contundente. Con suspenso, tras consultar el videoref el árbitro convalidó el try de Crotty.
Luego la conversión de Cruden salió desviada, pero el juez hizo repetir el envío porque los jugadores de Irlanda salieron antes de la patada. Y entonces sí, Cruden corrigió el disparo y le dio el triunfo a los All Blacks.
