En las pocas horas que van de la noche del domingo a la madrugada de ayer, se cometieron varios asaltos y robos.
Y como ya es una costumbre, los delincuentes amedrentan a sus víctimas empuñando armas de fuego, para terminar la faena llevándose carteras con algunos pesos, autos que deben abandonar al activarse la alarma, documentos y mochilas.
Y también, como una constante, tras las denuncias ante las autoridades, todo termina en un papeleo, sin resultados sobre la aprehensión de los responsables y mucho menos el recupero de lo robado.
Sonó la alarma
Poco antes de la medianoche del domingo, Maximiliano Tiller, de 32 años, fue sorprendido por dos sujetos armados, obligándolo a abandonar el VW Gol, vehículo en el que se movilizaba por Rió Negro y Doctor Diego Paroissien, en Guaymallén.
Tras lo cual también le sacaron 200 pesos de la cartera, dándose a la fuga en el rodado. Sin embargo, a las pocas cuadras se activó la alarma, situación que hizo que el dúo abandonara el vehículo y continuara su huida a la carrera.
La denuncia quedó a cargo de la Oficina Fiscal n° 9.
En la parada
Cerca de las 23, también de este domingo, una joven de 18 años, identificada como Karen Castillo, que se encontraba en una parada de ómnibus de Barcala y Boedo, en el departamento de Maipú, fue abordada por sujetos que tras amenazarla le sacaron la cartera y donde llevaba además de la documentación personal, la suma de 62 pesos, con lo que escaparon.
En este caso, interviene la Oficina Fiscal N° 10.
En la madrugada
Mientras que durante la madrugada de ayer un grupo de delincuentes armados sorprendieron a Dante Campo, de 76 años en la calle Alem, cerca del túnel de la Terminal de Ómnibus de Ciudad y después de amenazarlo le sacaron un bolso con libros y un teléfono celular.
Por lo que el septuagenario debió volver sobre sus pasos para denunciar el robo ante las autoridades de la Oficina Fiscal N° 1, de calle Rioja.
También en el Sur
Una mujer sorprendió a una anciana en su casa de Luzuriaga al 200, en la ciudad de San Rafael y después de ingresar, le tapó el rostro a la víctima, utilizando los siguientes minutos para revisar la propiedad hasta dar con unos 4000 pesos que la mujer tenía ahorrados.
Versiones de los medios sureños hacen referencia a que la ladrona habría utilizado para ocultar su rostro, un casco de motociclista, sin embargo con ese dato, personal policial de la Comisaría 8°, que realizó un "rastrillaje" por la zona, terminó sin poder dar con la asaltante.