De los seis candidatos que pugnan por suceder a Cristina Fernández, Adolfo Rodríguez Saá, 68 años, es el único que tiene experiencia en una campaña presidencial. En 2003, su candidatura obtuvo el 14,11%, unos 2,7 millones de votos. Se ubicó cuarto. En las PASO de agosto pasado, el candidato de Compromiso Federal fue apoyado por casi 500 mil votos.
El senador nacional y cinco veces gobernador de San Luis, pronostica que “habrá balotaje” y, pese a saber que no figura entre los favoritos, pide que no se minimice el papel que podría jugar en una segunda vuelta. Recibió a este diario en su despacho del Senado, en el cuarto piso del Congreso Nacional.
-¿Cree que hoy Massa y De la Sota lamentan no haber acordado con usted?
-Esto que le voy a decir es muy interesante. El porcentaje de votos que sacamos en las PASO y que vamos a incrementar en la elección presidencial, es exactamente el número con el que Massa desplazaría a Macri del segundo lugar.
Es también el número que permitiría a Macri superar el 30 por ciento y forzar el balotaje. Es exactamente el número que necesita Scioli para evitar el balotaje. Así que mire si será importante el número que nosotros tenemos. A ese número yo lo voy a representar con patriotismo.
-¿Qué decisión se imagina tomando ante un escenario de balotaje?
-Compromiso Federal va a proponer el 25 a la noche o el 26, que hagamos un acuerdo por la Argentina con los puntos en común. Imagínese un acuerdo para erradicar la pobreza, un plan de vivienda, reactivar las economías regionales y una agencia altamente especializada para combatir el narcotráfico. No sé quiénes van a pasar al balotaje y quién de ellos querrá firmar ese acuerdo. Si todos suscribimos el acuerdo, estaríamos eligiendo un programa y entonces es menos importante quién es el presidente.
-En función de esa agenda, ¿usted dirá a quién apoya en una eventual segunda vuelta?
-Exacto. En esto no tiene que ver la simpatía que yo pueda sentir por Scioli, Massa o Macri. Tengo excelentes relaciones con los tres. Pero digo que no se puede dar un cheque en blanco a ninguno de los tres.
-¿Usted habla de "cheque en blanco" como otros candidatos de "voto útil"?
-Le voy a explicar a qué llamo 'dar un cheque en blanco'. En 2007, Cristina Fernández de Kirchner sumó 53% (en realidad, fue un 46,29%), y entre la elección y su asunción, metió todas las retenciones. El 11 de marzo de 2008 metió la 125. Eso fue en nombre del respaldo del 53%. En 2011 obtuvo el 54%. Hizo lo que quiso y te señalaba que tenía el 54% de legitimidad. Ése es el cheque en blanco. El balotaje, entonces, nos sirve para acordar.
-Scioli y Massa también son peronistas.¿Cuál es su mirada peronista sobre esta campaña?
-Si Perón nos tuviera que orientar en esta Argentina, nos diría, ´pero muchachos, ¿cómo vamos a tener doce millones de pobres? Es una injusticia social extrema´. Éste es el problema número uno de la Argentina. Por de pronto, hay que suprimir el IVA a los alimentos y costarán el 21% menos. Después digo, 'pleno empleo para combatir la pobreza'.
Si sacamos todas las trabas a la producción industrial y a las economías regionales, se puede generar un millón cien mil puestos de trabajo. Sin retenciones. Y si construyéramos 500 mil viviendas por año, generamos otro millón de empleos. A ese país productivo lo podemos hacer. El círculo rojo ha convencido a los candidatos de que hay que volver a endeudar el país.
-Macri propone tomar deuda. ¿Eso lo diferencia?
-Totalmente. Van a endeudar el país. ¿Y después quién lo paga?
-El oficialismo levanta como bandera el desendeudamiento.
-Sí, pero no comparto lo que considera como 'desendeudamiento'. Si debíamos 150 mil millones de dólares y ahora debemos 300 mil millones, no sé en qué nos desendeudamos. Tenemos que lograr que el que invierta aquí tome deuda, no nosotros. ¿Por qué vamos a tener que ajustar la economía? Yo no acepto el mandato del círculo rojo.
-¿Me da un ejemplo de imposición del círculo rojo?
-El precio del gasoil que paga el chacarero argentino es el doble que en otro país. ¿Pero no es que el petróleo bajó? Sí, y en todo el mundo el precio del gasoil bajó. Aquí, el Gobierno, equivocadamente, paga a las petroleras el doble del valor internacional del barril de petróleo. Así las sostiene. ¿En qué país del mundo, los pobres financian a los ricos? ¿Cómo vamos a comparar a un productor de manzanas de Río Negro con una petrolera? Es injusto.
-Usted dice que el Gobierno no lo atiende. Massa y De la Sota le cerraron la puerta. ¿Son rencores de su presidencia de fines de 2001?
-¿Sabe qué pasa? Ninguno se puede comparar con la honorabilidad, la honestidad de los procedimientos con que hemos gobernado. Los fondos del Fonavi se emplearon en viviendas. Los fondos de Vialidad, en rutas. Los de infraestructura, para gasoductos y diques. Hay que preguntar a los otros en qué los emplearon. En San Luis no hay asentamientos ni villas de emergencia. No pueden explicar qué hacen con la plata. Los millones en publicidad les va a permitir ganar las elecciones pero no ser mejores presidentes.