Tras la renuncia a la presidencia partidaria de Francisco Pérez el ex candidato a la gobernación por el FpV, Adolfo Bermejo consideró que el alejamiento debe alcanzar también al vice Carlos Ciurca y al resto de la conducción cuyo núcleo incluye a los actuales intendentes Alejandro Bermejo (Maipú) -su hermano- y Emir Félix (San Rafael) y a la senadora nacional Anabel Fernández Sagasti (La Cámpora).
El ex senador nacional atendió ayer no menos de cuatro entrevistas radiales en una de las cuales blanqueó explícitamente un secreto a voces en la interna del PJ: “Me gustaría ser presidente del PJ” dijo en Radio Cooperativa y destacó el portal Unidiversidad.
“La premisa será encontrar en consenso la unidad del peronismo”, agregó. “Quizás en esta cumbre (por la de Tunuyán prevista inicialmente para el lunes) aparezcan propuestas y nombres y si se puede definir (la nueva conducción) sería lo ideal. Yo estoy a disposición de lo que los compañeros crean pero pretendo serlo de la unidad y no de un sector ni de algunos por sobre otros”, remarcó.
“Estamos encaminados a normalizar y a elegir las nuevas autoridades", sostuvo. Y subrayó que “la renuncia de Pérez desencadena que trabajemos con mayor celeridad y nos predispongamos todos a allanar los caminos para elegir las autoridades”.
Entre el presidente saliente Pérez y el aspirante a presidente entrante Bermejo existió el miércoles un contacto telefónico poco antes de que se hiciera público el texto de la renuncia.
Por el momento el PJ mendocino continúa sin alcanzar acuerdos internos que abarquen a todos los sectores, a tres días de la fecha inicial prevista para el encuentro de Tunuyán fogoneado desde el sector Azul, que integra Bermejo, quien ya presidió el PJ, previo a Rubén Miranda, Alejandro Abraham y Pérez.
El kirchnerismo reitera que no irá a Tunuyán si la reunión es el lunes, aunque deja las puertas abiertas para una asistencia a un encuentro posterior que sea “más amplio”.
La importancia que Bermejo comenzó a otorgar a la designación de las nuevas autoridades partidarias, coincidió con la actitud de otros dirigentes del sector: para la presidenta del bloque de senadores provinciales del FpV, Patricia Fadel el nuevo titular del PJ debe ser “un dirigente de peso como los Bermejo, (Jorge Omar) Giménez u Omar Félix”.
Mientras el intendente de Tunuyán, Martín Aveiro consideró que “cada sector va a querer proponer su nombre, pero se elegirá el que tenga mayor consenso”.
Sin embargo, pareció contrastar con posturas previas de otros dirigentes. Desde el propio sector Azul, el intendente de San Martín, Jorge Omar Giménez venía apuntando a que de Tunuyán saliera una “mesa operativa” que fijara las posiciones políticas.
Desde el alicaído “paquismo” el ex ministro Guillermo Elizalde habló de la necesidad de “una conducción colegiada y de transición”.
En el kirchnerismo, el diputado nacional Guillermo Carmona siempre se inclinó porque “la conducción formal del PJ se defina en una interna”.
En tanto, desde Integración el intendente sureño Emir Félix (que ayer logró la aprobación del presupuesto comunal y su ordenanza tarifaria por 12 a 0, tras un reto del gobierno provincial al bloque radical de concejales) sorprendió con su postura: “Si el peronismo quiere mejorar tiene que desechar los viejos sectores partidarios y crear otros” porque “vamos a una etapa fundacional nueva que va a necesitar de algún tipo de legitimación electoral”.
El peronismo mendocino se debate entre posturas diversas frente a la necesidad de reorganizarse y de pasar a ocupar un rol de oposición, tras la seguidilla de derrotas electorales de 2015 frente a la unificación opositora.
Ahora, a tres meses del último traspié, debe encarar un proceso que incluye la definición del matiz opositor que adoptará en los próximos cuatro años, una renovación de autoridades partidarias y la definición de los nombres que propondrá al gobierno radical, para ocupar las vacantes en los directorios del Epas, Aysam, Juegos y Casinos e Instituto de Seguridad previstas para la oposición.