“Este es un equipo preparado para atacar y lastimar. Quiero que sea agresivo en el sentido de doblegar futbolísticamente al rival”. El sello que busca implementar Sebastián Méndez es claro, pero aún no termina de plasmarlo en el desarrollo de los partidos.
El Tomba modelo 2016 se encuentra en plena formación, con varios jugadores nuevos - sumado Ortiz que no tuvo continuidad la temporada pasada- y un sistema táctico diferente al que venía utilizando con anteriores entrenadores. Por eso suena lógico que el dispositivo no esté completamente aceitado y salga a la perfección.
La idea está. El mensaje del Gallego baja con firmeza y los jugadores están convencidos en imponer las condiciones en cancha que se propone como estandarte de juego desde afuera.
¿Cuál es la identidad que quiere darle el adiestrador al Expreso?. El DT arma su laboratorio y trabaja para sacar la fórmula que le de un equipo equilibrado, pero que tenga como única tarea lastimar al contrario en campo ajeno.
Esto se traduce en presión bien alta, manejo de la pelota el mayor tiempo posible y ser punzante por ambas bandas.
Sin modificar el esquema (4-3-3), pero sí los apellidos desde el arranque, alternó buenas y malas en las dos presentaciones del certamen. El Expreso mostró que le falta tiempo para consolidarse.
Primero apostó por sólo un delantero clásico (Ayoví) rodeado de volantes con vocación ofensiva y mediocampistas en posición de ataque.
El ensayo inicial no salió como se imaginaba y por eso Méndez decidió buscar otros intérpretes buscando mejorar el funcionamiento.
Sabiendo que podía quedar muy expuesto del medio hacia atrás, se la jugó con tres atacantes definidos y el equipo evidenció una cierta mejoría.
Más allá de los nombres, en este arranque de torneo la idea principal no se negoció de ninguna manera.
Habrá que ver cuál es la propuesta si el Mago Ramírez está bien y pide minutos.
Por ahora todo está en una incipiente construcción del estilo Méndez.
Igual diseño con distintos apellidos
Frente a Rosario Central e Independiente, el DT apostó a jugar con tres hombres arriba,claro que lo hizo con diferentes apellidos y características. En el debut acompañó a Jaime Ayoví con volantes ofensivos en posición de ataque, mientras que ante el Rojo recurrió a delanteros definidos. Un 4-3-3 muy claro.