El acoso a una adolescente de 15 años por parte de un grupo de obreros que estaba arreglando una vereda en el barrio porteño de Flores desencadenó una pelea entre el padre de la menor y los agresores que terminó con heridos y detenidos, informó hoy una fuente policial.
"Yo salí a sacar la basura y me empezaron a decir cosas, a silbar, a decirme 'linda' y cosas así. Cuando volví a entrar a mi casa mi papá había escuchado todo y salió a reclamarles por lo que habían hecho", contó hoy Iara, víctima del acoso, a la señal TN.
El hecho ocurrió en la tarde de ayer cuando la menor salió de su casa de la calle José Martí 998, y un hombre, quien junto a otros cuatro arreglaba una vereda frente de su vivienda, le dijo un "piropo", lo que provocó la reacción del padre de la chica, informaron fuentes de la Policía Metropolitana.
"Cuando Iara entró, mi marido fue a decirles que tenía 15 años, que no podía hacer eso, cuando vio que uno de ellos agarraba una pala y otro una piedra y avanzaban hacia él", relató la esposa del padre de la menor, identificado como Juan L.
La mujer contó esta mañana que su marido "está muy comprometido con las reivindicaciones feministas y por eso fue a reprocharles lo que habían hecho", pero que cuando vio que los obreros se le iban encima, "agarró una maza que había en el piso para defenderse y se desató la pelea".
En medio de golpes e insultos, el padre de Iara corrió a refugiarse en su casa, a donde fue seguido por los obreros, quienes, según los denunciantes, patearon la puerta de ingreso y rompieron un vidrio, pero sin lograr entrar a la vivienda.
Durante la pelea, uno de los obreros, identificado como Mariano Gabriel C, de 21 años, tuvo un corte en el cuero cabelludo, en tanto el padre de la menor resultó herido en la boca y en ambos codos, sin haber otros lesionados, consignaron fuentes policiales.
Alertados por la gresca los vecinos llamaron a la policía, que detuvo a todos los participantes en la pelea y dio intervención al SAME para asistir a los heridos.
Las seis personas que participaron en la pelea fueron imputados por lesiones y daños, y quedaron en libertad unas horas después, mientras que la casa de la menor quedó con custodia policial por orden del Juzgado interviniente.
La ley 5742, sancionada en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires en diciembre de 2016, considera el acoso en los espacios públicos como las conductas físicas o verbales de connotación sexual que afectan la dignidad de las personas.