Tal cómo había adelantado Los Andes, este viernes recibió el alta el médico José Paulos (34), imputado por la muerte de Luciana Montaruli (27), la joven que perdió la vida en un accidente de tránsito ocurrido el sábado pasado en el Acceso Sur. El acusado fue trasladado a la cárcel.
El sospechoso tras el hecho estuvo internado en el hospital Español-nosocomio en el que trabaja como clínico-, ya que presentó algunas heridas. Se recuperó, y debido al delito que le imputaron fue llevado al penal.
Este hombre está acusado de un homicidio simple con dolo eventual-tiene penas de 8 a 25 años-, por el fallecimiento de Paula. Además, en la carátula figuran lesiones graves por las heridas que provocó en el taxista Ricardo Ruiz (19) y en Fernanda Egaña (24), amiga de la joven fallecida. Las tres víctimas iban en un taxi cuando el médico, a la altura de Rodríguez Peña los embistió desde atrás con su Volkswagen Gol. Montaruli perdió la vida en el acto.
La situación del detenido se fue complicando por las pruebas obtenidas por los pesquisas. El test de alcoholemia arrojó 2,06 gramos de alcohol en sangre en el momento del accidente, lo cual refleja su estado de ebriedad. Su condición de médico resultaría un agravante, ya que era conocedor de los efectos del alcohol en una persona frente al volante.
Respecto a la velocidad que manejaba, las primeros resultados de los peritajes indican que lo hacía entre los 100 y 130 kilómetros por hora. Además, testigos aseguraron que luego del choque quiso escapar pero se lo impidieron. Todos estos días estuvo internado con custodia policial, hasta que este viernes le dieron el alta y lo enviaron a la penitenciaría por orden de la fiscal del caso, Liliana Giner.
Ahora se vendrá la jugada de su abogado defensor, Ramiro Villalba, quien ya le adelantó a la fiscalía que pedirá la prisión domiciliaria de su cliente, cuestión que resolverá un juez de instancia superior.