El Gobierno francés no dará marcha atrás en la reforma laboral ideada por el presidente Emmanuel Macron, aseguró hoy la ministra de Empleo gala, Muriel Pénicaud, tras las multitudinarias protestas de la víspera contra la medida.
"Creo que todos entienden que la reforma es el resultado de una promesa electoral de Emmanuel Macron, que fue elegido presidente", dijo Pénicaud a la emisora de radio RMC.
"De modo que el Gobierno está poniendo en práctica lo que los franceses nos pidieron hacer, así que no daremos marcha atrás", añadió.
Cerca de 223 mil personas protestaron el martes en toda Francia contra la reforma de la legislación laboral, según el Ministerio del Interior. El sindicato CGT, que convocó la manifestación, cifró sin embargo los participantes en unos 500 mil. Sin embargo, la huelga de un día convocada por el mismo sindicato tuvo un impacto limitado.
Los decretos de reforma presentados por el primer ministro, Edouard Philippe, el pasado 31 de agosto permiten reforzar la negociación de condiciones laborales a nivel de empresa, en lugar del sector.
Las reformas también permiten que las empresas más pequeñas negocien directamente con los trabajadores o con los representantes que ellos elijan en lugar de con los sindicatos. Además, relajan la protección contra el despido y reducen las indemnizaciones por despido improcedente.
"No es una ley laboral, sino una ley que le otorga plenos poderes a las empresas", criticó el secretario general de CGT, Philippe Martinez, en una entrevista con el periódico "Le Parisien" publicada el domingo.
El CGT convocó una nueva protesta para el 21 de septiembre, un día antes de la prevista aprobación de la reforma. Francia cuenta con una cuota de desempleo del 10 por ciento.