Ante Atlético Tucumán, sin dudas uno de los candidatos a uno de los dos ascensos que brinda este torneo, fue un nuevo golpe de realidad para Independiente Rivadavia que, vale decirlo, no ha hecho una campaña despreciable para nada.
El Azul, cada vez que enfrentó a algún equipo que pelea directamente por meterse en el Reducido, en la mayoría de los casos nunca pudo sacar un resultado positivo. Dos ejemplos claros son los últimos dos partidos de local donde perdió ante Ferro (cuarto) y el Decano (segundo).
La Lepra todavía está cerca de esas posiciones de privilegio, pero como dijo Pablo Quinteros después del partido “la idea es sumar 50 puntos que es lo que nos habíamos propuesto”.
En el horizonte que comprenden estas 10 fechas que restan para la finalización del torneo, casi todos los rivales que tiene el Azul, están involucrados en esa pelea para ingresar a la fase definitoria, y seguramente será difícil sacarse de encima la ilusión de abrochar algo más que una aceptable campaña.
No ha sido un torneo fácil para Independiente, más allá de lo deportivo. Es que ha tenido que sortear muchos problemas a lo largo del torneo. El atraso en el pago de los sueldos, las duras lesiones y todos los jugadores que decidieron emigrar a mitad de año son algunos de esos contratiempos que el plantel de Pablo Quinteros ha sufrido,
Por eso la idea del propio entrenador de volver a enfocarse en el objetivo inicial, es lo más saludable para Independiente Rivadavia, en lo deportivo y también en lo institucional. Si la fecha 42 viene con “algo más” bienvenido sea.
Se prepara para ir a Madryn
El próximo compromiso de la Lepra será en Puerto Madryn, ante Almirante Brown de esa ciudad.
El compromiso ante el equipo de la ciudad de las ballenas se jugará en horario matutino. Será el domingo a las 11.
