El poeta brasileño Manoel de Barros falleció hoy, un mes antes de cumplir 98 años, en un hospital de la ciudad de Campo Grande donde estuvo internado dos semanas, luego de una cirugía en el intestino.
Manoel de Barros es considerado por los críticos como uno de los máximos exponentes de la poesía brasileña contemporánea y tres de sus libros fueron traducidos y vendidos en España, Francia y Portugal.
El escritor había nacido el 19 de diciembre de 1916 en la ciudad de Cuiabá, en el estado de Mato Grosso do Sul, y pasó su infancia en la región del Pantanal, cuya riqueza natural inspiró su obra, dedicada a celebrar la complejidad de las cosas más sencillas y la condición "minúscula" del ser humano ante el universo. Esta visión quedó reflejada incluso en los títulos de varias de sus obras, como "Livro sobre o Nada" (El Libro sobre la Nada), de 1996, y "Tratado geral das grandezas do ínfimo" (Tratado general de las grandezas de lo ínfimo), de 2001.
"Bajo la apariencia surrealista, la poesía de Manoel de Barros es de una enorme racionalidad. Sus visiones, oníricas en un primer instante, luego se revelan muy reales, sin huir a un fundamento ético muy profundo", expresó en una ocasión el filólogo brasileño Antonio Houaiss.
De Barros dijo que buscaba inspiración caminando por la región del Pantanal para explotar "los misterios irracionales que están en un refugio al que llamo 'lugar para ser inútil' ", consignó la agencia DPA.
"Desde hace 60 años exploto estos misterios... Apunto cosas en pequeños cuadernos... No uso PC... Siempre creo que en la punta de mi lápiz hay un nacimiento", sostuvo. En castellano está publicada entre otras su antología "Todo lo que no invento es falso".