A la inglesa

Se vienen las últimas 10 fechas del torneo y Gimnasia tendrá cinco partidos de local. Si es efectivo en el Legrotaglie complicará a sus rivales directos.

A la inglesa

Los conocedores de las categorías del fútbol argentino tienen en claro que los resultados mandan, por esa razón siempre buscan la forma de sumar puntos de la manera que sea. Y una de las mejores formas de lograrlo es gracias a la “Media Inglesa”.

En este sistema los entrenadores buscan hacerse fuertes de local y tratar de obtener, al menos, un empate de visitante. Si esta regla se cumple su equipo, seguramente, será protagonista o engrosará su promedio.

Pensando en mantener la categoría, este sistema es el que debería adoptar Gimnasia de cara al final del torneo, ya que el Lobo es uno de los equipos más comprometidos con el descenso, junto a un grupo de equipos que no se sacaron ventaja en lo que va del campeonato.

Es que el Lobo, de los diez partidos que le restan al torneo, tiene cinco partidos en el Legrotaglie y si los gana, obliga a sus rivales directos a sumar la misma o mayor cantidad de puntos.

Es decir, que si el mensana suma los 15 puntos que disputará en su cancha obligará a rivales como Sportivo Belgrano a conseguir 18 de las 27 unidades que le quedan en disputa. Así, automáticamente lo superaría en la tabla y quedaría fuera de los cuatro equipos que pierden la categoría.

Cuatro finales

A saber, los muchachos de Omar Labruna tienen cuatro partidos trascendentales ante rivales directos por el descenso: Estudiantes de San Luis, Sportivo Belgrano, Unión de Mar del Plata y Central Córdoba, de los cuales recibirá a los cordobeses y a los santiagueños en el Parque, mientras que tendrá que visitar San Luis y Mar del Plata en menos de un mes.

En el medio tendrá varios partidos complicados como Gimnasia de Jujuy, Los Andes y Villa Dálmine en los que tendrá que sacar a relucir sus ganas de quedarse en la categoría, ya que ellos están disputando un lugar en el Reducido por un lugar en Primera.

Cabe recordar que Gimnasia, a pesar del bajón de resultados en el que está sumergido, sigue siendo uno de los mejores equipos con rendimiento de local ya que suma 30 de los 48 puntos que disputó en el torneo, mientras que su contracara siguen siendo los partidos fuera de Mendoza.

Ese karma no le permite hacerse fuerte y estar un poco más aliviado en los promedios. Es que el Lobo de los 48 puntos que puso en juego sólo sumó 4, algo que lo tiene como el peor de la categoría.

Llegó el momento donde los jugadores y el cuerpo técnico del Lobo deberán mentalizarse en sumar la mayor cantidad de puntos posibles y así alimentar el sueño que quedarse en la B Nacional una temporada más.

Labruna confirmó el equipo con algunas sorpresas

En la práctica de ayer por la mañana en el Malvinas Argentinas, Omar Labruna paró el equipo para enfrentar mañana a Gimnasia de Jujuy.
Para este encuentro quedaron confirmados los ingresos de Gerardo Corvalán y Federico Pomba en lugar de Maximiliano Montiveros y Yaír Marín, respectivamente.

La buena noticia fue que César Carranza se recuperó de la molestia muscular que sufrió en Pergamino y será el compañero de ataque de Damián Akerman.

El resto del equipo será el mismo que cayó ante Douglas Haig y que buscará levantar cabeza ante el Lobo jujeño.

El plantel Azul cobró y viajó a Madryn

Horas de emprender el viaje hacia Puerto Madryn, al plantel de Independiente Rivadavia se le canceló el mes de abril. La dirigencia se mueve para intentar de cumplir con los compromisos salariales. Recibida la buena noticia, el plantel subió al avión sabiendo que en Chubut deberán encontrar algo de lo bueno que había mostrado y que lo llevó al Azul a soñar con el Reducido por el segundo ascenso. Por ahora, en el horizonte cercano, aparecen los 50 puntos como el objetivo a conseguir. 
Pablo Quinteros decidió introducir tres variantes con respecto al equipo que cayó ante Atlético Tucumán. Afuera Lucas Parisi por Javier

Silva, Cristian Podestá por Alexis Viscarra y Freddy Coronel por Agustín Sanfilippo, para que en esta oportunidad el Azul se acomode al molde del 4-4-2 y echar por tierra el 4-3-3 que tan buenos réditos supo rendirle al Negro Quinteros. De ganar en Madryn, no sólo se mantiene con vida en la pelea por el Reducido sino que le daría una mano a Gimnasia ya que Brown pelea por quedarse.

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