Ayer la Policía belga emitió un aviso de búsqueda contra Salah Abdeslam, un francés de 26 años nacido en Bruselas, cuyo hermano Brahim se hizo estallar el viernes por la noche delante de un bar en París, y que tiene una orden de captura internacional emitida por Bélgica.
La Policía francesa sospecha que Salah Abdeslam sería el octavo hombre de los ataques de París.
Los investigadores franceses de los atentados perpetrados el 13 de noviembre por al menos siete kamikazes que dejaron al menos 129 muertos (de los cuales 117 fueron identificados) y 352 heridos y reivindicados por la organización Estado Islámico, tampoco excluyen la hipótesis de un segundo fugitivo.
La intensa búsqueda de Salah Abdeslam continúa, tanto en Francia como en Bélgica. El lunes la Policía belga lanzó una importante operación para detenerlo, sospechando que se encontraba en una vivienda en Molenbeeck, una comuna popular de Bruselas.
“Había indicios de que se encontraba en Molenbeeck. No logramos detenerlo. Esto condujo a elevar el nivel de alerta”, explicó el ministro de Interior belga, Jan Jambon a la radio pública flamenca. “Salah Abdeslam es calificado como peligroso y podría estar fuertemente armado”, precisa el aviso lanzado por la policía belga.
El gobierno decidió elevar a 3, de 2, el nivel de alerta. Esto conllevó la cancelación del partido de fútbol que debían disputar las selecciones de Bélgica y de España ayer por la noche.
Con las amenazas de atentados consideradas como “posibles y verosímiles”, el gobierno decidió desplegar unos 300 militares adicionales para proteger estaciones de tren, subte y aeropuertos, indicó la oficina del primer ministro belga, Charles Michel. Se suman a los 220 militares ya desplegados.
El lunes, la justicia inculpó de “atentado terrorista” a Mohammed Amri (de 27 años) y Hamza Attou (de 21 años) que fueron controlados por la policía francesa cuando estaban en el mismo vehículo que Salah Abdeslam el sábado por la mañana en la autopista a unos 60 km de la frontera con Bélgica.
Estos dos hombres niegan su participación en los atentados e indicaron a los investigadores que sólo respondieron al llamado de Salah que les pidió que vinieran a buscarlo a París.
El abogado de Amri, Xavier Carrette, declaró al canal de televisión RTBF, que su cliente “dijo ignorar todo lo que pasó en París” y que Salah Abdeslam, “un amigo del barrio”, “no habló de ello” durante el trayecto.
Los dos inculpados declararon que dejaron a Salah Abdeslam el sábado por la mañana en Bruselas, sin embargo dieron dos lugares diferentes.