A las 19.47 partió desde el Aeroparque porteño el avión presidencial que llegó a las 21.20 a nuestra provincia y trajo a Cristina Fernández de Kirchner. La mandataria nacional viajó con la diputada mendocina Anabel Fernández Sagasti; con su vocero oficial, Alfredo Scoccimarro, y con el titular de la Anses, Diego Bossio, un viejo conocido de Mendoza.
En el aeropuerto la esperaban el gobernador, Francisco Pérez; funcionarios provinciales y los integrantes de la fórmula oficialista para la gobernación, Adolfo Bermejo y Diego Martínez Palau. De allí fue directo al hotel Intercontinental, donde pasó la noche, y al llegar se encontró con más funcionarios y unos 200 militantes con banderas y regalitos que hicieron guardia para verla pasar y saludarla.
A Cristina todo el peronismo local la esperaba con grandes expectativas. Además de por el tiempo que pasó desde aquel 12 de junio de 2013, cuando vino por última vez, su visita era muy deseada por varias razones a las que es imposible establecerles un orden de importancia.
La Presidenta llegó a sólo 18 días de las elecciones, con el peronismo corriendo de atrás al frente opositor Cambia Mendoza, que postula a Alfredo Cornejo y Laura Montero. Por eso, entre los más esperanzados con su visita están los miembros de la fórmula del Frente para la Victoria, que buscarán dar continuidad al gobierno de Francisco Pérez.
La votación está a un paso y es por ello que, lógicamente, los postulantes se ilusionan con que la presencia de la mandataria aquí los ayude a sumar votos. Más allá de que en otros tiempos la relación con Bermejo no fue buena y que incluso la jefa de Estado apoyó a otro candidato en las PASO de abril (Guillermo Carmona), este gesto vendría a demostrar que las aguas se aquietaron y los pulgares están arriba.
Incluso, es justamente en territorio del ahora senador nacional por Mendoza en donde Fernández de Kirchner hará sus anuncios, inauguraciones y teleconferencias. La primera y en principio única actividad que tendrá -o al menos que se anunció oficialmente- es la inauguración de la Unidad de Diagnóstico Intensivo (UDI) del hospital Metraux, en Fray Luis Beltrán (Maipú).
Allí mismo hará tres videoconferencias. Una servirá para dejar “inauguradas obras de infraestructura de la Ruta 40 en Tunuyán, otro tramo de la misma ruta en San Martín de los Andes y en Bariloche” y otra será un contacto con una fábrica de Santa Fe. Luego, según comentaron desde Casa de Gobierno, la mandataria recorrerá el Procrear de calle Paso de Maipú. En algún momento durante o después de esas actividades (no había precisiones al respecto hasta anoche), hará tres anuncios importantes.
Si bien aquí tampoco hay mayores detalles, sí se sabe que dirá algo sobre el proyecto hidroeléctrico y de regulación de aguas Los Blancos, una de las obras más largamente anunciadas de la historia de Mendoza. Otro tema que abordará será algún tipo de beneficio para la vitivinicultura y otro con la Bodega Bianchi de San Rafael, que sería un subsidio, quizá destinado a la adquisición de maquinaria.
En tanto, respecto a qué significa su visita para el PJ mendocino, una voz cercana a Pérez remarcó: “En el caso nuestro su visita es una caricia para la etapa final de la gestión del Gobernador y, con la otra mano, una caricia a la fórmula Bermejo-Martínez Palau.
El hecho de que la Presidenta venga el día antes (de lo que había programado en principio, ya que sólo venía por el día) es un gesto político muy significativo. En sus dos mandatos no lo ha hecho casi nunca”, analizó la fuente, agregando que eso daría lugar a que anoche se produjera alguna reunión con los referentes provinciales.
Esta visita se da en un día en el que ya se preveía una movilización muy importante en Mendoza y en todo el país por la marcha contra la violencia de género. En Mendoza, el “Ni Una Menos” comenzará a las 17 y a esa hora la Presidenta estaría subiéndose al avión para regresar a Buenos Aries.
Previamente, dicen, haría algún comentario al respecto. Eso, como otros detalles de su visita, es una especulación, que se develará hoy a partir del mediodía.
ATM se metió en la campaña oficialista
La Agencia Tributaria Mendoza (ATM), el organismo de recaudación creado por el gobierno de Francisco Pérez para remplazar a la ex Dirección de Rentas, se metió ayer de lleno en la campaña electoral: dos intendentes peronistas entregaron exenciones impositivas.
En dos comunicados distintos, ATM informó que Luis Lobos, el concejal a cargo de la intendencia de Guaymallén, y Juan Carlos De Paolo, jefe comunal de General Alvear, encabezaron los actos junto a funcionarios de la agencia.
Lobos se transformó en el candidato del Frente para la Victoria luego de una dura interna con su antecesor, Alejandro Abraham, quien incluso denunció irregularidades en la votación y el escrutinio de las PASO. Y aunque fue el más votado, la suma de todos los precandidatos oficialistas fue apenas dos puntos mayor a la de todos los postulantes del opositor Frente Cambia Mendoza, que definió en las urnas al cobista Marcelino Iglesias como su postulante.
En el acto guaymallino, se concedió la exención de los impuestos inmobiliario y automotor a 1.066 vecinos. Allí Lobos dijo: “Es un placer estar acá para dar esta muy buena noticia”.
En Alvear, el acto fue similar y los beneficiarios también fueron jubilados y personas con discapacidad. Allí, la cara visible fue De Paolo, que busca su cuarto mandato consecutivo y el quinto de su carrera.
El intendente también tiene una dura pelea con Cambia Mendoza, que en las PASO sacó 20 puntos más que el FpV y eligió como candidato a Walther Marcolini.