El futuro del torneo de 30 equipos comenzó a debatirse, aunque quedó claro que se respetará. Según anunciaron fuentes que formaron parte de la reunión que se desarrolló en el predio que posee la AFA en Ezeiza, el nuevo formato se aprobó pero restan limar algunas diferencias entre 'grondonistas' y los 'grandes'.
Tras varios vaivenes y trascendidos que aseguraban que Boca, River y San Lorenzo impugnarían el nuevo campeonato, se llegó a la conclusión de que se disputará un torneo con 30 equipos y que los diez ascensos anunciados se respetarán. Sin embargo, resta definir la forma en que será empleado y las variantes que tendrá el mismo. La próxima semana volverán a reunirse para continuar resolviendo la forma en que se llevará a cabo el torneo.
Una posibilidad es que se desarrolle un campeonato corto en dos zonas de 15 hasta mitad de año y así se pueda ajustar al calendario de Europa, tal como reclamaban Daniel Angelici y Rodolfo Donofrio. En este punto se agregarían descensos y ascensos, ya que sino no habría un incentivo para las otras categorías durante los próximos seis meses.
Otro punto que generó polémica, sobre todo en los clubes grandes, se dio en lo estrictamente económico. Fútbol Para Todos anunció un ajuste en la partida presupuestaria que provee 220 millones más, que permitirá alcanzar un total de 1.667 millones. Esto generaría una seria rebaja para los elencos de Primera, debido a que el reparto pasará a ser con diez equipos más.
Sin embargo, a diferencia de lo que se pensaba, los clubes ascendidos no tendrían un aumento por alcanzar la máxima categoría (unos 14 millones de pesos) y continuarían percibiendo lo mismo que hasta ahora (unos 4 millones). Esto en principio sirvió para calmar los pedidos de los grandes, pero no se terminaría el problema, ya que los elencos del ascenso anunciaron que continuarán reclamando.
En sintonía con este tema, se da otro debate de índole político por los mismos problemas. ¿Cuál será el poder de los equipos grandes, o algunos importantes del Interior, si se le suman otros diez elencos desde la B Nacional y del Federal A? Seguramente mucho menor, por eso también la fuerza empleada por muchos para que el torneo no prospere o en su defecto, recupere cuanto antes su formato original de 20 equipos.
Otro tema importante que se continuará debatiendo es si a estos elencos ascendidos se les otorgará o no representación en el Comité Ejecutivo o serían suplentes, tal como se anuncia desde los pasillos de Viamonte. Un punto clave y no menor de cara a las elecciones presidenciales de la AFA del próximo año.
Ante esto, empieza a tomar forma la posibilidad de que en los próximos años haya una mayor cantidad de descensos que ascensos. Es decir, que se discute si en las temporadas subsiguientes podrían descender cuatro y ascender dos, hasta llegar al número actual de equipos participantes en la máxima categoría.
Las dos propuestas que se debaten
1) La de Angelici: el presidente de Boca, apoyado por River, San Lorenzo y otros clubes, planteó la alternativa de que en el primer semestre del año que viene haya un torneo de transición, que podría ser con dos grupos de 15. Y que el campeonato real comience en agosto, para quedar en paralelo con la temporada europea. De esta manera, habría dos ascensos más a mitad de 2015 y entonces quedarían 32 equipos. Y los primeros descensos serían recién en junio de 2016.
En lo económico, Boca y River (hasta el 2009 tenían entre los dos el 25% de lo recaudado por la TV) pretenden que se vuelva a la vieja repartija de dinero y que no sea como ahora. Y que los diez que ascienden sigan cobrando como en la BN, 4.000.000 de pesos.
Y un dato no menor: este grupo, ya mirando a las elecciones de AFA el año que viene, quiere que a la hora de votar, lo hagan los 20 de Primera y que los que asciendan no tengan voto propio sino que formen parte del grupo de la BN.
2) La de Segura: la original de Julio Grondona, respaldado por los clubes del Interior, los del Ascenso y algunos equipos llamados chicos. Que se juegue de febrero a diciembre, y que haya dos descensos a fin de año, un campeón y que se armen clásicos de ida y vuelta. Y para ir a las copas, se armaría una Liguilla después del torneo, en noviembre y diciembre.
En lo económico, la idea es seguir como en la época de Grondona, desde que arrancó el Fútbol para Todos: más igualdad a la hora de distribuir el dinero de la TV. Por eso apoyan los del Interior y los más chicos.
Luis Segura: "Nunca se pensó en no jugar este campeonato"
“La semana que viene se define si se juega de febrero a diciembre o se juegan dos zonas de 15 en el primer semestre para arrancar un torneo largo en junio. Nunca se pensó no jugar este campeonato. Sí lo que se está analizando son las consecuencias deportivas y políticas de una competencia totalmente distinta. Queremos que esto salga de la mejor manera posible”, destacó Luis Segura, en conferencia de prensa.
Sobre el formato, señaló que “hay que ver cómo entra el campeonato en un semestre que tiene tres partidos de Selección argentina, Copa América y Copa Libertadores”.
Y agregó: “Si el torneo se realiza con un campeonato de transición, pienso que no habría descensos. Si es de febrero a diciembre, pueden ser dos descensos o acelerar el achique del campeonato y sumar más descensos”.
