Cientos de artículos periodísticos aseguran que la vida sexual es mucho mpas intensa en verano que en invierno. El sol, además, activa la producción de oxitocina por las células de la piel, y eso, asegura la literatura científica, fortalece los estímulos placenteros.
Así, parece no querdar duda de que el verano es mpas excitante. Pero suele pasar que el espejo, la pareja, los hijos o los problemas cotidianos perturben esa imagen idealizada del verano como "la época más propicia". Un mito a derribar.