La ministra del Interior Theresa May hizo hábiles malabares entre las facciones pro y antiBrexit del partido conservador para aparecer como la candidata de consenso entre los 'tories'.
Euroescéptica de alma, sin embargo a comienzos de este año decidió mantenerse fiel al primer ministro renunciante David Cameron y defender mantener al país en la UE.
Pero, si bien se limitó a abogar por ello lo mínimo necesario, en cambio siguió insistiendo sobre la necesidad de limitar la inmigración, tema favorito de los proBrexit, convirtiéndose así en alguien creíble para ambos campos.
May, casada de 59 años de edad, una mujer alta y delgada, con aspecto patricio, ojos muy expresivos, que luce el cabello corto y canoso, se ubica en el ala más a la derecha del partido conservador. Sin embargo, durante la campaña para el referéndum abordó algunos temas sociales intentando seducir a los votantes y también romper con cierta imagen de frialdad.
A pesar de haberse pronunciado a favor de la UE, su asesor político trabajó para el campo Brexit. Eso le aporta “vínculos políticos con ellos” y puede atraer el apoyo de muchos conservadores euroescépticos, dijo recientemente Tim Oliver, de la London School of Economics.
Su participación en la campaña fue anecdótica. “La UE está lejos de ser perfecta”, pero “el interés nacional es seguir siendo miembro de la UE,” dijo a finales de febrero, después de las reformas logradas en Bruselas por Cameron.
A continuación, se limitó a decir en abril, durante su único gran discurso de campaña, que salir de la UE “no resolvería todos los problemas de inmigración” del Reino Unido.
Esta hija de un reverendo anglicano ha reunido un equipo a su alrededor y ha trabajado entre bastidores para conseguir el apoyo de los parlamentarios conservadores, según opinaba el diario conservador The Daily Telegraph.
Su única rival a la sucesión de Cameron, la secretaria de Estado de Energía Andrea Leadsom, tiró la toalla este lunes reconociendo que May cuenta con mayor apoyo por parte de los parlamentarios 'tories', y se alineó detrás de ella.
“Se encuentra idealmente posicionada para poner en marcha el Brexit de la mejor manera posible para los británicos, y ha prometido que lo hará”, declaró.
La confirmación de su designación al frente de los 'tories' debe aún ser consultada en el seno de su formación política, pero según responsables de la misma es algo inminente.