Seguramente ya tenés tu vestido elegido, ya empezaste a mandar las invitaciones… Pero,¿ya elegiste tu peinado? Aunque ya tengas una idea predeterminada, tenés que tener en cuenta factores como la forma de tu cara, el estilo del vestido, qué tipo de velo llevarás, etc.
Elegir el peinado para tu casamiento es otro de los grandes dilemas a los que te vas a enfrentar. Para acertar en la elección es importante acudir a un buen profesional que te asesore, sin embargo, hay factores importantes que debés tener en cuenta:
Recogido: Si tu cara es más bien redonda y tu nariz pequeña, éste es tu peinado. Los recogidos tienen mil y un estilos, pueden ser desde clásicos hasta más modernos, por ejemplo, con las puntas hacia fuera o con el flequillo hacia un lado. Este tipo de peinado es perfecto para los vestidos que tienen mangas o un cuello un poco cerrado.
Semirecogido: Si no estás acostumbrada a llevar recogidos –o simplemente no te gustan-, optá por un semi recogido, que te permitirá tener despejado tu rostro al mismo tiempo que podés lucir tu pelo. Hay de varios tipos, pero quizás el más común es el de pelo suelto con los laterales recogidos. Últimamente se usan mucho los peinados de novia con trenza, un look un poco más informal. Si tu vestido es strapless y tus hombros quedan al desnudo, definitivamente deberías hacerte una prueba con este tipo de peinado.
Suelto: Es una de las opciones menos elegidas por las novias, quizás porque es atrevida y menos convencional. Sin embargo, si tu nariz es pronunciada o tus rasgos faciales son muy marcados, te favorecerá mucho, sobre todo, si le das un poco de volumen. El pelo suelto es una buena alternativa para los casamientos con aires hippies.
