A sólo once meses de su fundación, Podemos se confirma como la primera fuerza política española, según un sondeo del diario El Mundo. El movimiento de indignados que ha desatado un terremoto político lograría el 28,3 % de los votos, cuatro veces más de los que alcanzó en las elecciones parlamentarias europeas.
El Partido Popular, que logró hace tres años más del 44% de los sufragios en las elecciones generales, desciende hasta el 26,3% y los socialistas a un 20,1%, el peor resultado en la historia de la democracia.
Pablo Iglesias, flamante secretario general de Podemos, se convierte en el líder mejor valorado mientas que Mariano Rajoy está, como siempre, entre los peores.
Podemos cosechó 1,2 millones de votos, el 7,9%, del total en las elecciones europeas y sorprendía a toda España. Otras encuestas de estas últimas semanas confirman que los éxitos del los indignados de Podemos continúan aumentando su caudal de apoyo.
Comenta El Mundo: “Con estos resultados, el Congreso de los Diputados se dividiría en tres bloques - predominando la izquierda- y media docena de minigrupos, ninguno de los cuales llegaría al 5% de representación”.
Los pactos para formar un Gobierno sólido serían muy difíciles. Las dos posibilidades que se abren presentan enormes complicaciones: acuerdo Podemos-PSOE, o bien gran coalición PSOE-PP.
En ambos casos, el futuro de los socialistas se presentaría oscuro, al borde de la disolución, fagocitado por el empuje novedoso del partido de Iglesias, o condenado al desahucio definitivo de sus votantes tradicionales, para los que sería impensable ir de la mano de la derecha.
El escenario que dibuja la encuesta bien puede calificarse de histórico. Nunca ha sucedido algo igual: surgir de la nada y hacerse con la victoria de un plumazo, atrayendo como un imán el malestar, la decepción, las ganas de cambio e incluso de ruptura de una gran parte de la ciudadanía.
“Las razones de este vuelco impresionante están a la vista de todos, aunque las dos formaciones tradicionales las hayan intentado obviar: los sacrificios impuestos a sangre y fuego para superar la crisis, la corrupción rampante de algunos mientras la mayoría se ahoga o la falta de perspectivas para los jóvenes son algunas de ellas.”
“Si los datos que cosechan PP y PSOE se comparan con los que obtuvieron hace tres años en las elecciones generales, el descalabro se dibuja en toda su dimensión.”
En cuanto al líder popular y presidente del gobierno, Mariano Rajoy, lo valoran positivamente sólo un 14,6% de los consultados y lo rechazan un 56,5%, entre ellos uno de cada cinco de quienes eran sus votantes.
El gobierno popular sale peor parado ya que tiene un 10% de apoyo y un 63% de rechazo, incluso uno de cada tres votantes populares.
Las últimas encuestas confirmaban esta tendencia de la situación política española. Un sondeo encargado por el Parlamento de Navarra, situaba a Podemos en primer lugar con el 35,48% sumando 18 de los 50 escaños del Parlamento. En segundo lugar marcha una fuerza nacionalista muy poderosa en Euskadi. Se trata de EH Bildu que cosecharía 11 asientos y el 20,76% de los sufragios.
Dos partidos tradicionales caen en picada. La Unión del Pueblo Navarro, que gobierna hace años en la comunidad, desciende de 19 legisladores a 8 (15.34%).
Los socialistas que gobernaron en su tiempo, bajan de 9 a 5 (9,71%) de los 50 escaños del Parlamento navarro, mientras que UPN caería de sus 19 actuales a 8 escaños. Geroa Bai (nacionalista) sube al 8,59%, Izquierda Unida al 4,1%, el Partido Popular a un distante 3,17% y Unión del Pueblo y Democracia al 2,5%.
En Cataluña, el periódico publicó ayer un sondeo propio en donde surge Podemos como tercera fuerza electoral pese que tiene una participación política a contramano de la polémica entre nacionalistas y el estado español. Tampoco tiene dirigentes conocidos y está organizando su estructura.
