La tecnología no sólo trajo innovación, aportó también todo un ecosistema de lenguaje que antes nos era ajeno y que lentamente aprendimos a interpretar. Sin embargo la renovación de palabras va tan rápido como la actualización de los dispositivos que usamos.
De a poco nos vamos acostumbrando a que lo que comprábamos y cambiábamos cada una década ahora debemos renovarlo cada dos años. Basta con ver el ejemplo de los teléfonos o los televisores LED.
La tecnología es una gran aceleradora de los tiempos y algunos, con más o menos esfuerzo que otros, intentan que la innovación no se los lleve puestos.
Por eso es que además de aprender a distinguir entre la actualización tecnológica, también hay que aprender los nuevos términos que ese avance trae consigo.
Algunas palabras ya nos resultan familiares -hardware, software, PC, etc.- pero otras van sonando en varios lados pero no alcanzamos a entender bien qué significan. Un ejemplo viene de la mano de las palabras "troll" o "wearable" que surgen de nueva tecnología y que tienen impacto en nuestra vida cotidiana pero no sabemos qué significan.
¿Cómo saber qué nos hablan? Compartimos aquí un pequeño diccionario de las nuevas palabras que hay que aprender y el significado que tienen.