¿No va más? Es la gran pregunta que da vueltas por la Bodega. Y que por estas horas no tiene respuesta oficial, porque los protagonistas principales hacen del silencio un culto.
No era sorpresa el malestar de Jorge Almirón ante la realidad que le toca vivir en este momento, y ya había anunciado que se debía una charla profunda con José Mansur, presidente del club para analizar la situación del plantel y el inicio de la competencia.
En el medio de esto, el entrenador había mandado claros mensajes públicos para la dirigencia, buscando, tal vez, una reacción inmediata que le trajera buenas noticias.
La cumbre fue ayer por la tarde y duró algunas horas, y al finalizar el entrenador se fue sin dar declaraciones cuando fue requerido por los periodistas. El teléfono de Mansur permaneció apagado, al igual que el de Daniel Oldrá, quien también participó de la misma y tiene un peso de relevancia a la hora de opinar.
Esto no hizo más que alimentar más el rumor de renuncia por parte del adiestrador, cansado de esperar soluciones por parte del titular Bodeguero.
Los motivos que tiene Jorge Almirón para dar un paso al costado no son un misterio: la salida de muchos futbolistas, varios de ellos titulares indiscutidos y refuerzos de jerarquía que no llegan.También se decía que los dirigentes querían incorporar- estaba todo acordado- a Rubén Tito Ramírez, y que el DT le bajó el pulgar porque no es de su gusto futbolístico.
Hoy por la mañana está citado el plantel y habrá que ver cómo siguen los acontecimientos. Seguramente el técnico estará presente frente a los jugadores.
Ante la decisión del adiestrador de poner sobre la mesa su dimisión, los directivos, ahora, tienen el objetivo de apaciguar las aguas y convencerlo para que continúe en el cargo.
¿Podrán hacerlo?
No pudo encontrar el equipo que deseaba
¿Hay equipo? No. Hoy no. Esta cruda realidad la expuso el propio entrenador. Y no es un capricho de alguien. Frente a esto parece que no existen argumentos para refutarlo.
Jorge Almirón entiende que con el actual plantel no le alcanza para ser protagonistas en las tres competencias que tiene por delante, si es que continúa en el banco de suplentes.
Al Expreso se le viene el debut de la próxima semana por Copa Argentina frente a Defensa y Justicia, y está lejos de encontrar el conjunto ideal para plantarse en cancha. Almirón reconoció días atrás que tenía el once en la cabeza, pero increíblemente con apellidos que no asomaron por la Bodega.
Durante la pretemporada ensayó distintas variantes y cambió piezas, pero el resultado fue el mismo: no quedó conforme con el funcionamiento colectivos.
Hoy todo es incertidumbre en el Tomba, con el propio técnico y con el elenco que debe saltar a la cancha.
