¡Ni el tiro del final te va a salir!

El Tomba, que sumó afuera después de tres salidas, jugó un partido discreto y empató ante Quilmes. Sobre la hora, Zuqui estrelló un tiro en el palo.

¡Ni el tiro del  final te va a salir!
¡Ni el tiro del final te va a salir!

Sólo para sumar. Igualdad necesaria la hora de tomar algo de aire después de tanto sufrimiento fuera de casa. Un punto y regreso a la Bodega.

El primer tiempo de Godoy Cruz no pasó de discreto. Una vez más, el equipo del Gato mostró las carencias de variantes ofensivas. Frente a un rival que no ejerció una presión alta, que lo dejó maniobrar hasta tres cuartos de cancha y que tampoco tiene demasiadas ideas para atacar, el Expreso no fue capaz de intentar algo más que las corridas de Kevin Mercado, por izquierda, o el cambio de ritmo de Ángel González, por derecha.

El juego interior sigue siendo el gran déficit del equipo. El Tomba siente la ausencia de un futbolista que clarifique, que sea capaz de romper esquemas con un pase vertical, de esos que lastiman de verdad. Entonces, ante la falta de socios futbolísticos, Fernando Zuqui se siente obligado a trasladar demasiado, Leandro Fernández baja muchos metros y se pierde entre los volantes rivales y cada ataque pierde sorpresa.

Sin embargo, los problemas no sólo están cuando el equipo tiene la pelota. Cuando no dispone de ella, es más elástico que compacto y esos espacios son aprovechados por el rival.

En el arranque, Jonathan Zacaría apareció con libertad por cada una de las bandas y casi de milagro no tuvo que sacar del medio el Bodeguero.

Sorprendió la posición de Juan Alvacete, parado a la izquierda de Luis Jerez Silva, cumpliendo la función de doble cinco. En consecuencia, Kevin Mercado fue un volante bien abierto por el andarivel zurdo, casi un mediapunta.

Y si lo del Tomba no era bueno, lo de Quilmes mucho menos. Lo del equipo de Falcioni era tan pobre que daba la sensación de que a Godoy Cruz le bastaría sólo con proponérselo. De hecho, lo mejor del local se produjo cuando el balón pasó por los pies del tándem Canelo-Zacaría. Poco, muy poco. Sólo era cuestión de convencerse y ser letal.

En el amanecer del complemento, el Gato leyó bien el cambio cantado: afuera Alvacete (estaba amonestado) y adentro Gastón Giménez. Acierto al por mayor y crecimiento del equipo.

Lentamente, el zurdo le cambió la cara al mediocampo. Un par de minutos después de su ingreso, Mercado tuvo el primero: bomba de zurda que Benítez desactivó al córner.

Con el ingreso del formoseño, el Tomba tuvo más fluidez y juego asociado. Así, merodeó el arco de Benítez. Fernández lo tuvo con un zurdazo, pero otra vez Benítez estuvo atento. Y el final fue con un remate de Zuqui que se estrelló en el palo.

El empate es poco a la hora de mirar los números y la tabla, pero seguramente le dará confianza al equipo por lo que venía mostrando en terreno ajeno.

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