Felipe Pigna toma la lapicera y firma la dedicatoria: "A los negros que trabajaron en la viña". Hace un momento, en medio de la recepción de la bodega Andeluna, ha hablado sobre los primeros trabajadores de la vid en la región: africanos. "Los primeros llegaron como sirvientes personales de algunos conquistadores y fundadores y, a partir de la década de 1590, se registra el inicio de la trata de personas en Cuyo", detalla.
Pigna recuerda que la "saca de indios" hacia Chile fue la causa de que las encomiendas cuyanas quedaran despobladas (los huarpes eran llevados como esclavos a trabajar las minas), de modo que, como en el resto de América, ante la falta de "mano de obra" se inició la incorporación en los viñedos de esclavos de origen africano. La industria del vino, pues, también da cuenta de los abusos filtrados en sus orígenes y que se continúan hasta hoy, con la precarización del trabajador rural. Siempre, la parte de la historia que se borra.
¿Dónde está ese registro del vino hecho por africanos? Hacia 1777, en la jurisdicción de Mendoza, casi la cuarta parte de la población era afrodescendiente. "Es interesante señalar que para la época de fines de la colonia posiblemente la mayor parte de los trabajadores en las áreas de viñas, además de los miembros de las familias criollas de los pequeños productores, fuesen afroamericanos, tanto esclavos como libres conchabados", expone en su libro.
Hay un dato interesante para ejemplificar cómo se borra, otra vez, esa parte de la historia: se trata del grabado de los lagares y sus pisaderos, tomado por Draghi Lucero. En 1946, el grabado original publicado por Draghi mostraba a los pisadores claramente afroamericanos. En cambio, la "copia" del mismo grabado exhibida en el museo La Rural presenta a los pisadores blanqueados, con rasgos caucásicos.
En su libro, Pigna explica: "El museo La Rural se construyó y desarrolló en un contexto dentro del cual la clase intelectual y empresaria de Argentina atribuía la casi totalidad de los méritos de la industria del vino a los inmigrantes europeos, a la vez que tendía a minimizar el aporte de los criollos de la época colonial y de los afroamericanos en particular".
Después, el autor de los "Mitos de la historia argentina" volverá a contar la anécdota de San Martín. Su cambio de etiqueta para "bajar línea" y valorar el vino hecho en la región de Cuyo al confundir a sus oficiales intercambiándolo con un varietal de Málaga. Esa, entre otras, es una de las perlas de "Al gran pueblo argentino salud. Una historia del vino, la bebida nacional".
Antes del final de la charla, anunciará que pronto se lanzará un vino apadrinado por él, "El Cruce", que coincide con el bicentenario de la gran travesía del Ejército de los Andes. "Es un blend, por supuesto", dice el historiador.
