El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu exhortó a una “inmigración masiva” de judíos europeos a Israel tras el tiroteo frente a una sinagoga de Copenhague que terminó con la vida de un judío danés, renovando así un duro mensaje que ha molestado a algunos aliados europeos de Israel.
Netanyahu dijo que en momentos en que aumenta el antisemitismo en Europa, Israel es el único lugar donde los judíos se pueden sentir verdaderamente seguros.