Una zona de vestuarios poco común. Una multitud periodistas y media docena de cámaras habían invadido el lugar en busca de testimonios. El primero, como casi siempre, en salir a dar declaraciones fue Sergio Arias. El equipo está en la final y no es poca cosa.
“La idea era estar tranquilo y lograr que la presión no nos lleve por delante. El equipo en todo momento trató de manejar la ansiedad y creo que fuimos justos ganadores. Costó un poco manejar la ansiedad, lo hicimos bien por momentos. Es un gran mérito haber ganado este partido”, tiró Arias.
“Tenemos que entender que esto es Gimnasia. El hincha está muy ansioso, mucha gente ha vuelto a la cancha y se ilusiona con este equipo. El jugador dentro de la cancha trata de dar lo mejor. Por ahí juega un poco apurado y se equivoca en la entrega pero en definitiva sabemos que hay un buen plantel y estamos contentos por llegar a la final”, agregó.
“Por momentos jugamos bien, no como otras veces pero hicimos una diferencia de 3 goles. Siempre buscamos el arco contrario y eso es un mérito. Ojalá podamos concluir de la mejor manera”, cerró.
Mi pie izquierdo
Todos le prenden velas al tobillo del pie izquierdo de Cristian Taborda. El goleador no se termina de recuperar de su esguince de tobillo y ayer nuevamente, al igual que en el encuentro disputado en Palpalá, jugó infiltrado. No pudo terminar los noventa minutos y salió rengueando del campo de juego.
Con Taborda en una pierna y Lucas Farías lesionado, Gimnasia cuenta sólo con dos delanteros: Sergio Marclay y Matías Navarro. Por eso se trabajará ahora a pleno para que el Mono llegue de la mejor manera al miércoles.
