Si bien recién esta noche es posible que se conozca la sanción que recaerá sobre Godoy Cruz Antonio Tomba por el vandalismo ocurrido en el partido contra Racing, hay varias aristas que dejó la suspensión del partido.
Ayer, el ministro de Deportes Marcelo Locamuz aseguró que: "me juntaré con la gente de Godoy Cruz para ver cómo seguimos en el futuro. Nosotros tenemos que defender el estadio que es patrimonio de los mendocinos y también la seguridad de la gente que quiere disfrutar de un espectáculo, que es casi el 98 por ciento de la que fue el domingo".
Ante la pregunta sobre si esto podía ser que no se le diera más el Malvinas al Tomba, aseguró que "Puede ser que no se juegue más en el Malvinas o que se juegue sin público", lo que prende una luz de alarma.
El ministro destacó que las autoridades de Godoy Cruz tienen firmado un convenio con la Provincia, por el cual se hacen cargo de los daños que puedan ocasionarse en el estadio. Además de cumplir con el cánon previsto para cada partido que es de 46.650 pesos, ahora tendrán que pagar por los daños provocados en el baño y la rotura de algunas de butacas. La primera valuación arrojó un monto de 26.000 pesos. También indicó que el club se encuentra al día con los pagos y siempre han cumplido con todas las exigencias.
"Los daños materiales son pocos. El daño pasa por otro lado. Sin ningún tipo de dudas todos deben repudiar lo que pasó. El problema es de delincuentes que fueron con una sola intención y nada tienen que los políticos de uno u otro lado. Por otra parte, quiero pedirle al presidente de la Liga Mendocina que si está tan seguro en que hay políticos involucrados, debe dar nombres", aseguró.
Ya desde el domingo, la situación está muy politizada. Mientras desde el gobierno nacional hacen hincapié en que todo estuvo organizado para perjudicar la idea de Scioli de que vuelvan los hinchas visitantes, y aducen una amistad de Mansur con Mauricio Macri, como así también sacan a relucir viejos contactos entre la barra de Godoy Cruz y Alfredo Cornejo, próximo gobernador de la provincia, desde el otro lado apuntan a la ineficacia de los operativos y hasta se puso en el ojo de la tormenta el manejo de las cámaras de seguridad.
En ese punto se generó otra polémica. Es que mientras Locamuz aseguró por la mañana en Canal 9 que "Durante el partido no grabarán, me imagino que será así. Deberá ser el Ministerio de Seguridad quien conteste esa pregunta", un rato más tarde dijo al programa 261 Deportes de Radio Jornada que "las cámaras funcionan y todo quedó registrado y fue enviado el mismo domingo a la fiscalía".
Consultado luego el ministro de Seguridad, Leonardo Comperatore, aseguró que "por un problema técnico no se grabó lo sucedido", mientras que el jefe de la policía Juan Carlos Calleri aseguró que no tenían personal capacitado para filmar durante los partidos e incluso esto lo refrendó el senador Gustavo Cairo tras una reunión que la Bicameral de Seguridad tuvo con funcionarios de Deportes y Seguridad.
"Las cámaras de seguridad que están en el estadio, alrededor de 19, deben funcionar perfectamente. Notamos que hay una desidia por parte de las autoridades sobre el control, son ellos quienes tienen que verificar en tiempo y forma que las cámaras funcionen", aseguró .
“En esta ocasión no pudieron grabar los hechos y hubo que traer a otra persona del Ministerio para grabar. Hay que corregir estas falencias e insistir con las sanciones efectivas para que estos hechos no se repitan, porque perjudican a la provincia en la imagen nacional”, dijo el senador.
Sobre este tema también se expresó Locamuz que se mostró molesto por el tratamiento que se le ha dado a la situación en Buenos Aires. "Cuando pasa algo acá, rápidamente dicen que somos violentos y que el Malvinas es inseguro, pero no dicen lo mismo cuando pasa allá. Si el Malvinas es inseguro, que tienen que decidir de la cancha de Boca, en dónde un hincha consiguió atacar a jugadores del equipo rival, más precisamente me estoy refiriendo al hecho del Panadero con los jugadores de River".
El enojo por el no funcionamiento de las cámaras también creó malestar en el equipo de trabajo de Alfredo Cornejo, desde donde aseguraron que “las canchas hoy por hoy son tierra de nadie. Es una locura que las cámaras no funcionaban. Hay un abandono total. Vamos a trabajar en el tema ni bien asumamos”, dijo una fuente a Más Deportes.
Con respecto a cómo seguirá el tema en lo judicial, Cairo remarcó la necesidad que "desde el Poder Judicial, se apliquen las sanciones para todos los que fueron detenidos y se pueda trabajar en la prohibición del ingreso de estas personas nuevamente a las canchas. Hoy existe un vacío legal en este aspecto y los violentos conocen esta situación por eso vuelven a cometer desmanes, porque saben que no van a permanecer detenidos”.