No es secreto para todos nosotros que empresas como Facebook y Twitter utilizan nuestros datos para poder lucrar mediante servicios de publicidad en línea, entre otras cosas.
Cada foto, comentario, post, palabra o chat que sostenemos en las redes sociales son parte de un ecosistema de motores altamente inteligentes, que categorizan a los usuarios y pueden aprender con gran rapidez los intereses relacionados a todo lo que puede ser parte de la publicidad que se nos presenta en cada sitio al que vamos.
Socialmente parece estar aceptado que esto sea así (no por nada Facebook pisa los mil millones de usuarios activos en todo el mundo, un número que sigue creciendo). El problema que varios sectores a nivel global reportan, es que al manipularse con tanta libertad la información privada de las personas se presta este vasto sistema de información a las manos de otros interesados en saber todo sobre alguien.
Agencias de seguridad y gobiernos de distintos países ya han estado en el epicentro de escándalos entre ciudadanos y empresas de Internet, quienes en un esfuerzo por ganar la confianza de sus suscriptores han en los últimos años desarrollado normativas y reportes “claros” respecto a cómo manipulan la información del público.
Ahora una nueva red social quiere cambiarlo todo, y no cualquier organización está detrás de ella. Minds.com está fuertemente vinculada al grupo Anonymous. ¿En qué se diferencia?
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