El acceso a películas, series, programas de TV y música en Internet, tiene una historia muy curiosa. Durante muchos años las empresas encargadas de gestionar los derechos de estas creaciones se negaron rotundamente a poner el contenido en la red de redes, que siempre fue un símbolo de piratería y pérdida de dinero.
Con el tiempo la realidad terminó decantando: aún sin vender música o películas en Internet, la piratería avanzaba. Tarde o temprano fue evidente que las personas adoptan métodos legales de acceso al contenido, sólo que hay que saber como ofrecerlo.
Gracias a productos como Spotify escuchar música por ejemplo, es legal, gratuito y mediante el uso de cortes comerciales se generan los ingresos necesarios para pagar las regalías. Pero ahora una plataforma conocida como Qroom quiere ofrecer la misma posibilidad, sin cargo alguno para el usuario, pero quitando los anuncios obligatorios. ¿Es legal? ¿Cómo se accede?