Si nos acotamos al registro literal de lo que implica una tapa en España, ésta remite esencialmente a un aperitivo que se sirve en la mayoría de los bares o restaurantes, acompañando la propuesta con una bebida espirituosa o no tanto... Esa degustación itinerante de comer en un sitio para luego partir a otros (de uno en uno, comiendo estas delicias) recibe el nombre de “tapeo” o “ir de tapas”.
En Mendoza la idea es ofrecerte “ir de tapas” por tres diferentes recetas pero en tu misma cocina, ya sea para que degustes en familia o te pruebes con amigos.
Tomá nota de las opciones que acerca el chef Cristian Nieva y animate a un “tapeo” vernáculo desde tu hogar.
Manos a la obra
Langostinos a la parrilla, tartar de remolacha y mayonesa al limón
Ingredientes
Langostinos, 3 unidades
Remolacha, 2 unidades
Alcaparras 50 grs.
Mostaza en granos, 1 cucharada
Cilantro, a gusto
Jugo de limón, a gusto
Aceite de oliva, a gusto
Salsa inglesa, unas gotitas
Huevos, 1 unidad
Paso a paso
Para el tartar: Rallar la remolacha en crudo, condimentar con alcaparras picadas, mostaza, aceite de oliva, sal, pimienta, salsa inglesa, cilantro y jugo de limón. Reservar.
Para la mayonesa: Batir un huevo e ir incorporando el aceite neutro de a poco hasta lograr montar la mayonesa, agregar jugo y ralladura de limón y un poco más de aceite hasta lograr la textura deseada; condimentar con sal y pimienta. Reservar.
Luego cocinar los langostinos a la parrilla con sal, pimienta y un poco de jugo de limón.
Montaje del plato: Colocar el tartar por debajo, la mayonesa casera y los langostinos.
Tip del chef: "En caso de que no te agrade la remolacha cruda, se puede hervir previamente y después rallarla (aunque la textura no será la misma); además es posible incluir algo de zanahoria para darle más color".
Ensalada de lengua al rescoldo y hongos
Ingredientes
Lengua, 1 unidad
Hongos champignones, 100 gr
Ajo, 1 unidad
Tomillo, a gusto
Jugo de limón, cantidad necesaria
Echalotes, 2 unidades
Perejil picado, cantidad necesaria
Aceite de oliva, cantidad necesaria
Radiccio, 1 planta
Pan de campo, cantidad necesaria
Lechuga escarola, 1 planta
Paso a paso
Previamente marinar los hongos con 12 horas de anticipación, ya que se usarán crudos. Limpiarlos bien y cortarlos en cuartos, luego dejarlos en jugo de limón con echalotes picados, sal y pimienta. Reservar en la heladera hasta el momento de usarlos.
Para cocinar la lengua: Envolverla en papel aluminio con 1 diente de ajo, tomillo, granos de pimienta y aceite de oliva. Luego cocinar al rescoldo de ceniza o -en caso de no poder- hacerlo al horno o parrilla aproximadamente por 2 horas hasta que esté tierna. Luego retirar y reservar. Una vez tibia, pelarla y cortarla con los dedos de forma irregular; colocarla en un bowl.
Agregar los hongos a la lengua lista, condimentar con aceite de oliva y rectificar sazón. Agregar hojas de radiccio y escarola fresca, mezclar bien y servir con una tostada de pan de campo.
Queso de cabra quemado, rúcula, tomate confit y mermelada de zanahorias
Ingredientes
Queso de cabra, 200 gr
Rúcula fresca, 1 atado
Tomate perita, 2 unidades
Mermelada, cantidad necesaria
Zanahoria rallada, 200 gr
Azúcar, 200 gr
Jugo de naranja, 100 c.c
Agua, 500c.c
Para la mermelada: Dejar macerando la zanahoria rallada junto con el azúcar, el jugo de naranja y la ralladura por 12 horas, y al momento de cocinar agregar el agua, cocinar a fuego bajo por 1hora y media aproximadamente. La zanahoria debe quedar transparente y el líquido debe formar un almíbar espeso. Reservar.
Para el tomate confit: Cortar los tomates al medio y condimentarlos con azúcar, sal, pimienta, aceite de oliva y alguna hierba de nuestro agrado. Cocinar a horno bajo por 40 minutos, se tienen que ablandar un poco sin llegar a desarmarse, luego reservar.
El queso: Cortar en porciones chicas y no muy gruesas; puede cocinarse a horno fuerte para que dore, o en una sartén justo al momento de servirlo.
Opcionalmente puede servirse con algún crocante o tostada, las hojas de rúcula aliñadas, el tomate, el queso bien caliente y la mermelada a un costado.
El tip: Se puede optar por el clásico provolone, o bien queso de cabra.