El año pasado se agregó al Manual de diagnóstico de desórdenes mentales la "Intoxicación por cafeína", patología que describe qué sucede en el organismo cuando se consume café con cafeína en exceso. Si bien las cantidades necesarias para hacer de esto un problema son grandes es bueno tener en cuenta cuál es el límite.
Cuando se consume café con cafeína en exceso se inhiben ciertos neuromoduladores que actúan como frenos de las hormonas dopamina y norepinefrina, responsables de la excitación en el cuerpo. Al producirse esto (que sucede incluso con cantidades pequeñas de café) es normal que se sienta excitación, ansiedad y aceleración de los pensamientos
Con respecto a los efectos en la salud mental, el profesor Mathew Johnson de la Universidad Jhon Hopkins, un estudioso del efecto de los fármacos en el ánimo y el comportamiento de las personas, anunció al diario La Nación que "si tomas menos de cuatro tazas diarias y no tienes ningún efecto colateral, entonces probablemente estés bien", pero también indica que esto no es así para pacientes con diagnósticos de ataques de pánico y además agrega que el café no filtrado produce un aumento del colesterol dañino, LDL.