Las autoridades prevén que las inundaciones que dejó el huracán Matthew en la costa oriental de Estados Unidos empeoren el panorama lentamente durante los próximos días, pues la lluvia que trajo sigue fluyendo hacia los ríos aguas abajo, lo que probablemente cause más anegaciones en muchos de los mismos lugares devastados por el huracán Floyd en 1999.
Mientras que Haití continúa siendo el país más afectado y está de luto oficial por el paso del huracán que ya dejó al menos 372 muertos, 246 heridos y desaparecidos. Más de 175.000 personas buscan protección en refugios de emergencia.
Cascos Azules de la ONU repartieron alimentos, agua y artículos de higiene.
"El agua está muy contaminada porque las letrinas quedaron destruidas e incluso cementerios enteros quedaron inundados. Existe el peligro del brote de epidemias como el cólera", advirtió hoy el director de Caritas Internacional, Oliver Müller.
"También ha aumentado en gran medida el número de mosquitos que transmiten el virus de Zika o que pueden provocar la fiebre del dengue", señaló.
La situación se agrava aún más por la destrucción de gran parte de las cosechas y ONG alertan sobre el peligro de una hambruna.
En tanto, en Estados Unidos fueron 20 las víctimas fatales, la mayoría de ellas de Carolina del Norte.
El gobernador de Carolina del Norte, Pat McCrory, dijo que las autoridades buscaban a cinco personas y que se teme que puedan encontrar más víctimas. "El huracán Matthew está fuera del mapa pero sigue con nosotros y sigue siendo mortífero'', dijo McCrory.
Princeville, un pueblo de 2.000 residentes que fue cubierto por las aguas del río Tar durante el paso de Floyd hace 17 años, fue evacuado el domingo, pues se esperaba que el río rebasara el nivel de inundación el lunes por la noche, algo no visto desde Floyd. McCrory dijo esperar que se ordenen más evacuaciones, pues se espera que algunos ríos alcancen sus niveles máximos el viernes próximo.
La hermana de David Bullock le llamó por teléfono para decirle que la policía estaba tocando las puertas para pedirle que se fuera. Él reconstruyó su casa después de la inundación de 1999. "Si me inundo de nuevo, no podré soportarlo. No puedo regresar y asumir el gasto. Si me inundó de nuevo voy a decir 'es suyo, yo me voy''', aseguró Bullock.
Más de un millón de personas en ambas Carolinas se quedaron sin electricidad y al menos cuatro tramos de la carretera interestatal 95 -la arteria principal que une la costa oriental, de Florida a Maine - fueron cerrados en North Carolina.
Ezequiel Crowe, de 10 años, escapó de las inundaciones en Fayetteville el sábado con sus padres y siete hermanos y hermanas cuando un barco de la policía los sacó de un apartamento luego de que las aguas subieron. "Tenía miedo, tenía mucho miedo y creí que el mundo iba a acabr, pero no fue así'', comentó.