Muchos estafadores ingresan al mercado medicamentos falsos, engañando así a miles de personas y haciéndose con un botín interesante. El peligro radica en que éstos podrían contener sustancias ineficientes o bien componentes peligrosos para la salud. Según la OMS, estos podrían tener etiquetas tan engañosas que pasarían por genuinos hasta para un profesional de la salud.
Cuándo dudar de un medicamento:
- Si se compra una droga que requiera receta sin receta, seguramente es falsa.
- Un envase adulterado, violado, sin prospecto médico o abierto resulta sospechoso.
- Si la fecha de vencimiento ha sido modificada.
- Si especifica un principio activo incorrecto o incoherente
- Frente a consultas o sospechas es importante llamar al laboratorio que lo fabrica.
Si un medicamento se compra en una farmacia y bajo receta es prácticamente imposible que haya sido adulterado o sea falso ya que es una práctica ilegal. Las compras de medicina por internet o en establecimientos no habilitados para esto es un comportamiento riesgoso que además fomenta este tipo de circuitos comerciales.