Al aplicar una pátina blanca a las tablas de madera se crea un efecto curtido. Este diseño es muy popular en las decoraciones rústicas, donde los remodeladores profesionales hasta usan plantillas para hacer un borde decorativo en los extremos de los pisos. Solo debés intentarse aplicar una pátina blanca en los pisos de madera viejos que tienen al menos 20 años. Si no, la pintura podría combar la madera fácilmente y arruinar todo el piso.
MATERIALES: una lijadora eléctrica circular. Discos de lija de grano número 90. Lentes protectores. Guantes. Pintura blanca a base de aceite.
INSTRUCCIONES
1. Lijá el piso de madera hasta quitarle toda la pintura con una lijadora eléctrica circular. Usá un disco de grano número 90. Siempre usa lentes protectores, guantes y una máscara cuando lijes para evitar entrar en contacto con irritantes como el aserrín, el moho y las partículas de esmalte.
2. Diluye una lata de pintura blanca en base a aceite con diluyente para pinturas hasta que quede liviana, casi translúcida.
3. Aplicá la pintura diluida sobre las tablas de madera con un rodillo. Aplicá la pintura en intervalos pequeños y dejala reposar durante 15 minutos.
4. Limpiá la pintura residual una vez transcurridos 15 minutos con pañales de tela. Seguí limpiando la madera hasta que no quede pintura en los pañales. Dejá que la madera se seque durante 24 horas.
5. Aplicá una capa de acabado transparente de poliuretano a la madera y dejá que se seque durante el tiempo recomendado, que suele ser 6 horas.
6. Pulí el piso con la lijadora eléctrica y con un disco pulidor.
TIPS: esta técnica se puede utilizar con el color que desees y que vaya con el estilo de cada espacio.