La naturaleza inherente de la música es compartida por seres humanos y animales. Las aves y las ballenas son conocidas por componer creaciones musicales que a menudo recuerdan el ritmo, la longitud, patrones y tonos de una canción creada por el hombre. La música puede alterar el ánimo de los animales, reducir el estrés, disminuir el apetito en aquellos que tienen la tendencia a comer de más y como auxiliar en la ansiedad por separación.
REDUCIR EL ESTRÉS
La música suave o clásica puede enmascarar sonidos como truenos, fuegos artificiales, el sonido de los camiones en el exterior y puertas que se cierran violentamente, es importante utilizarla ya que todos estas situaciones pueden causar estrés no deseado en animales.
Puede también disminuir el ritmo cardíaco y la ansiedad. Las mascotas que sufren de ansiedad por separación se distraen y calman por acción de la música y será menos probable que destruyan la casa, coman de más y se depriman por desajustes emocionales.
PODER CURATIVO DE LA MÚSICA
La música clásica es calmante y puede tranquilizar a los perros que sufren de ataques epilépticos. La música puede también estimular y liberar endorfinas en el cerebro que ayudan en la reducción del dolor. También se ha demostrado que la música calma los nervios, relaja los músculos, mejora la digestión e incrementa el sueño reparador.
LOS ANIMALES TIENEN UN SENTIDO INNATO DE LA MÚSICA
Las aves y las ballenas cantan canciones complejas para comunicarse con sus semejantes. La música afecta a los animales en la naturaleza también. Las ballenas aprenden canciones de otras ballenas. Las ballenas macho cantan para impresionar a sus parejas. Algunas especies de aves cantan duetos para establecer cortejo.
Animate a descubrir con tu mascota cual es la música que los une.