El venezolano José Miguel el "Chamo" (36), mencionado como sospechoso por el doble crimen de Marina Menegazzo (21) y María José Coni (22) ocurridos en Montañita, Ecuador, declaró ayer ante los investigadores y juró no tener vinculación con los asesinatos.
Según dijo el abogado querellante, Hernán Ulloa, "Chamo" ofreció un listado de los sitios dónde estuvo durante su estadía en Ecuador, quiénes lo recibieron y las actividades que realizó en Montañita.
También, a pesar de no estar imputado, aceptó que le realice un examen de ADN que ratifique su inocencia y que sus huellas digitales sean cotejadas con las halladas en el lugar de los asesinatos. Dichas pruebas se realizarán en los próximos días.
El querellante afirmó que afirmó que el sospechoso fue "bastante firme y enfático en que no ha participado del caso".
"Chamo habla de un acto de mala fe. El hecho de que niegue su participación no significa que esté desvinculado de la causa. Será una tarea de la fiscalía la de probar la veracidad de su relato", dijo el profesional.
Durante su declaración, destacó una pelea que habría tenido con Alberto Segundo Ponce Mina, el guardia de seguridad de la comuna, uno de los imputados que tiene el doble crimen. Justamente este hombre, desde la cárcel, fue el que involucró al "Chamo" con los asesinatos de las amigas.
La pelea entre ambos hombres, según el venezolano, se produjo porque él había comprado una máquina para hacer shawarma y que pensaba dedicarse a la venta de ese producto en las playas de Montañita, pero que Ponce Mina no se lo permitió ya que no tenía la autorización correspondiente.
Según “Chamo”, esto produjo una discusión que, para él, fue lo que provocó que Mina Ponce lo involucrara en el doble crimen.
De shawarma a droga
Siguiendo la declaración, "Chamo" admitió ante la fiscal que tras la imposibilidad de preparar shawarma, vendió los artefactos y se dedicó a comercializar droga en Montañita.
Es que por esta causa de estupefacientes, que el sujeto está preso en Ecuador.
Por el momento, pese a haber sido citado a declarar no se ha comprobado su participación en los asesinatos.
Además de Mina Ponce (en su casa se cometieron los crímenes) está imputado su amigo Eduardo Rodríguez, alias “El Rojo”.