En abril de 2001 arrancó por la señal Telemundo y poco a poco fue cautivando a la audiencia, no sólo a los latinos de Miami sino a los propios latinoamericanos, quienes a partir de 2005 se entusiasmaron con "Caso cerrado" y con su conductora, la cubana Ana María Polo, resolviendo conflictos y debatiendo los dilemas familiares y sentimentales más sensibles en una especie de juicio televisado que, en la mayoría de los casos, deja ver el lado más bizarro de las relaciones humanas.
En nuestro país comenzó a emitirlo Telefé a mediados de 2016 como uno de los tantos enlatados emitidos por la señal de las pelotitas sin que nadie imaginara que, en unos pocos meses, terminaría convertido en uno de los programas más vistos de la televisión argentina.
Más allá de las situaciones desopilantes que presenta el ciclo -y que ha llevado a muchos a preguntarse sin son realmente ciertas o ficcionadas- el encanto de “Caso cerrado” reside en la figura de su conductora, la que gracias a su carisma y empatía se ha convertido en una de las figuras más querida de la televisión.
Sin pelos en la lengua a la hora de bajar el martillo y decretar su dictamen, la cubana Ana María Polo González nació en La Habana hace 58 años, pero cuando apenas tenía 2 sus padres emigraron a Puerto Rico y luego a Miami, donde Ana hizo la secundaria, se recibió de abogada y de doctora en Ciencias Políticas, y donde también descubrió su faceta artística: comenzó a trabajar en varios musicales como bailarina, cantante y actriz.
Sin embargo, su vida personal no fue para nada fácil.
Dar el ejemplo
Casada siendo apenas una adolescente con un hombre 10 años mayor que ella, perdió un embarazo, se separó y nunca más quiso tener hijos ni volver a casarse.
Como abogada especializada en Derecho de Familia, cierta vez vivió un momento traumático que la marcaría para siempre: fue testigo del asesinato de una mujer por su marido, a quienes acababa de divorciar.
Desde entonces y durante toda su carrera se hizo reconocida por su lucha contra la violencia doméstica, la discriminación de las minorías y temas de relevancia para la comunidad hispana en los Estados Unidos.
Por si fuera poco, en 2003 le diagnosticaron un cáncer de mama, al que logró superar luego de varias operaciones (“me sacaron 20 ganglios, el tejido mamario y el seno”, dijo alguna vez) y con la entereza y el optimismo con que enfrenta todas las situaciones de su vida.
Como sobreviviente del cáncer, Ana María Polo es en este momento la primera embajadora hispana de la organización Stand Up to Cáncer (Unidos Contra el Cáncer) una iniciativa a nivel mundial cuyo objetivo es concientizar y recaudar fondos para avanzar y contribuir investigaciones colaborativas sobre el cáncer.
A través de todos estos años, ha dedicado su tiempo y colaboración para apoyar a la organización Susan G. Komen, compartiendo su historia y participando en un sin número de caminatas y eventos a través de todo el país para concientizar sobre la enfermedad.
La doctora recibió el prestigioso premio Mike Leland 2011, único otorgado hasta el momento a una figura hispana por Namic (Asociación Nacional por la Multietnicidad en las Comunicaciones) que honra a las personas y organizaciones dentro del mundo de las comunicaciones que demuestran un compromiso humanitario.
El programa
En principio se llamó “Sala de parejas” y era un programa televisivo que presentaba problemas conyugales. Pero en 2005 cambió su formato y pasó a llamarse “Caso cerrado”, ampliando las temáticas a conflictos de toda índole, brindando un espacio de resolución y asesoramiento para familias, matrimonios e individuos en necesidad.
En cada episodio, Ana María Polo se encarga de juzgar varias situaciones de conflicto legal y demandas, donde cada litigante muestra su versión de los hechos, sumando evidencias y testigos, sometiéndose así al juicio de la letrada.
“En ‘Caso cerrado’ yo no sólo emito decisiones en base al caso, sino que reflexionamos sobre lo que está pasando en el mundo y cómo nos afecta. Y yo creo que eso tiene un valor. Entonces mi reto en este momento es seguir manteniendo esa tensión, trayendo a la pantalla casos atractivos y que el público se siga complaciendo viendo estos casos. Quiero que se entretengan y que aprendan algo mientras pasamos un rato juntos durante el programa”, confiesa.
Si los casos son reales o no, ella nunca lo aclara. “Siempre me mantengo fuera de la producción para no perder la magia”, dice.
“Caso cerrado” alcanzó nominaciones a los Premios Emmy Nacionales y Premios Tu Mundo, que fue otorgado a su presentadora, la Dra. Polo. Esta propuesta de Telemundo Internacional, fue uno de los únicos talk shows de la televisión latina en mantenerse en el aire por 16 años consecutivos, consagrándose así como un verdadero éxito global.
Telefé lo emite semanalmente a partir de las 18.30 y los sábados desde las 22.30 en lo que ha dado en llamarse “Caso cerrado sin censura”.
El Canal 9 local lo emite diariamente a las 19.30 y el sábado a las 22.
Ser versátiles
Ya dijimos que la Dra. Polo era también cantante. Ella misma compuso y canta la cortina musical con la que arranca “Caso cerrado”. “Creo que los seres humanos tenemos que ser más polifacéticos, cultivar todos nuestros talentos como en el Renacimiento. Hoy nos especializamos tanto, que si hacemos una cosa descartamos todo lo demás”, dijo en una entrevista con diario Clarín.
“Desde niña quise ser actriz y cantante, pero mi madre siempre me dijo que esa no era una carrera segura, que estudiara otra cosa que me diera seguridad económica primero. Entonces me fui para el lado de mi segunda pasión: la Justicia”.
Aunque circulan rumores de que actualmente está en pareja con otra mujer, ella nunca ha querido hablar de su vida privada y simplemente responde: “a nadie debería interesarle con quien duermo”.
