Fue uno de los triunfos más emotivos que se recuerden para un partido del seleccionado argentino en un Mundial de fútbol, y los jugadores festejaron en los vestuarios descontrolados al son de la canción del momento: “Brasil, decime qué se siente”.
Argentina se había asegurado la clasificación para los cuartos de la Copa del Mundo de Brasil al ganarle a Suiza ajustadamente 1-0 con un gol de Angel Di Maria a tres minutos del final y después de que el alargue extendiera el juego a una hora y media incrementando las angustias.
El sábado en Brasilia enfrentará a Bélgica, ganador de Estados Unidos 2-1, también en alargue, y si pasa el compromiso exitosamente llegará a una semifinal después de 24 años.
El vestuario, como no podía ser de otra forma, fue una fiesta.