Aprovechando las nuevas tecnologías, cada más accesibles y más utilizadas, un joven francés decidió dirigir su drone hacia la terraza de un edificio para filmar a su vecina desnuda tomando sol.
El robot rápidamente tomó vuelo y llegó hasta la terraza para captar las “exclusivas” imágenes. Pero en segundos la joven descubrió la indiscreta cámara y se defendió con lo primero que encontró, con una escoba.
Sí, la chica, al advertir la situación, saltó del toallón, corrió hasta detrás de una pequeña habitación y salió al ataque con una escoba en la mano.
Su objetivo: derribar el drone y evitar que la filmación se difunda. Casi lo logra.