El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, anunció ayer que la flota de barcos de guerra en torno al portaaviones “USS Carl Vinson” llegará en los próximos días a aguas de la península coreana, tras la controversia surgida porque pese al anuncio gubernamental el buque iba en dirección contraria.
“Antes de fin de mes el portaaviones tomará posición en el mar de Japón”, indicó Pence, quien está de visita en Australia, tras reunirse en Sidney con el primer ministro de este país, Malcolm Turnbull.
Entre los temas que ambos trataron se encuentra precisamente el conflicto con Corea del Norte y el acuerdo de intercambio de refugiados entre Estados Unidos y Australia, punto de conflicto después de que lo criticara el presidente Donald Trump.