River ganó en Ecuador y está casi en octavos

River conquistó en Ecuador uno de esos triunfos que lo deja a punto de alcanzar la clasificación a los octavos de final con tranquilidad. En el George Capwell, arrancó perdiendo ante Emelec y logró revertirlo sobre el final para imponerse 2-1.

No hubo tiempo para acomodarse en Guayaquil. Movieron del medio y apenas superado el minuto de juego, Emelec se puso en ventaja ante un River que salió dormido. Eduar Preciado sacó un remate a colocar desde el vértice del área, al segundo palo, y la clavó en el ángulo.

El local fue esa ráfaga del amanecer del partido y después se pinchó. River pudo imponer su juego y poco a poco empezó a merodear cerca del arco de Dreer. Primero, Milton Casco estuvo cerca con un zurdazo.

Más tarde, Lucas Alario definió al gol, pero en posición adelantada y la visita se quedó con el grito atragantado. River jugaba mejor y generaba situaciones de gol.

"Laburo siempre sin importar si soy figura o no. Sabíamos que enfrentábamos un rival complicado y con su público a favor. Veníamos por un triunfo y lo logramos". Augusto Batalla.

Ariel Rojas y Leonardo Ponzio dominaban en el medio; Alario aguantaba la pelota arriba; Nacho Fernández era el distribuidor del juego; Pity Martínez desbordaba por derecha y los laterales pasaban al ataque. Lo único que le faltaba a River era el gol.

Y a los 41, River alcanzó el empate que merecía. Tras un tiro libre de Nacho Fernández al área que Alario bajó en el segundo palo, Jorge Moreira apareció en el área para definir cruzado e instalar el 1-1. El entretiempo llegó en Guayaquil con buenas sensaciones para Gallardo.

En el complemento la balanza pudo haberse inclinado para cualquiera de los dos lados. Casi anota Casco con un disparo que pasó cerca del palo, pero también tuvo que salvar en dos ocasiones con el pie Batalla al elenco de Gallardo.

En ese ida y vuelta de acciones, apareció Lucas Alario donde tenía que estar: en el área para aprovechar un horror defensivo rival. 
Camilo Mayada remató, Dreer despejó y la pelota se iba al córner, pero Byron Mina la metió adentro del campo y se la dejó servida al Pipa para que le dé el triunfo al Millonario con un distinguido pase a la red.