La división de "Diversión Nocturna", encargada de controlar los boliches de Mendoza, contaba hasta hace pocos días con 6 personas. Ahora, tras su traspaso al Ministerio de Seguridad, la cantidad de inspectores subió a 30. El objetivo será fortalecer los controles para evitar a toda costa el ingreso de menores a los locales bailables.
Antes de pasar a Seguridad, "Diversión Nocturna" dependía del Ministerio de Desarrollo y de la Dirección de Juventud. Ahora, depende de la Subsecretaría de Relaciones Institucionales, a cargo de Néstor Najul.
El funcionario, muy cercano al al gobernador Alfredo Cornejo, afirmó en dialogo con Los Andes que sumaron personal de Relaciones Institucionales para la nueva división que custodiará las noches mendocinas.
“La vamos a potenciar en calidad y cantidad”, afirmó Najul y contó que hoy tuvieron una reunión con representantes de los departamentos para empezar a coordinar acciones.
El funcionario admitió que su mayor desafío es evitar el ingreso de los menores de 18 años a los boliches y, claro está, evitar la venta de alcohol a esos chicos.
La "Ley de Diversión Nocturna" que rige desde 2011 fijó los determinados horarios para boliches, bares y pubs: a las 2.30 se cierra la taquilla, a las 4.30 se suspende la venta de alcohol y a las 6.30 se termina la fiesta.
En una reunión previa con dueños de boliches y pubs, Najul les detalló cuál será la misión para evitar a toda costa el ingreso a los menores. En contrapartida, los bolicheros pidieron mayor flexibilidad en los horarios.
Najul dijo que coordinarán con personal de las municipalidades para “de a poco” ir aumentando los controles.