Preocupan picadas clandestinas en Tupungato

El último sábado murió un joven de 18 años que se estrelló con su auto en pleno centro de la ciudad. Los vecinos reclaman más controles.

Hace tiempo que las picadas clandestinas en distintos puntos de la ciudad generan denuncias entre los vecinos y una aguda preocupación en la sociedad de Tupungato.

Sin embargo, la situación se ha convertido hoy en la polémica central, después de que el fin de semana un joven de 18 años -muy conocido en el departamento- muriera al chocar contra un poste cuando practicaba estas carreras ilegales.

El lamentable hecho blanqueó la necesidad de buscar una solución urgente al tema. Aunque todavía no hay un plan de acción definido, distintos organismos analizan algunas medidas.

Desde la Policía Vial del Valle de Uco adelantaron que buscarán dar charlas a los jóvenes sobre las responsabilidades y deberes del conductor. Por su parte,, el municipio comienza a plantearse revivir el programa de Padres Preventores.

“He llamado varias veces a la Policía de madrugada para avisar que hay chicos picando, pero o no tienen movilidad para venir o se demoran. El tema es que cuando llegan, ya no hay nadie”, se quejó María, una vecina de la calle Rocca. “Me da miedo de que se metan en alguna casa o atropellen a alguien que va caminando, es un gran peligro y nadie toma conciencia”, agregó la mujer.

El peor final

La madrugada del sábado 28 de enero dos chicos se desafiaron con el rugir de sus motores. Minutos después, un joven de 18 años -que conducía su propio Ford Fiesta rojo- perdió el control de su vehículo y se estrelló contra un poste de luz en la esquina de Liniers y Pueyrredón, en pleno centro de Tupungato.

Eran las 4 de la mañana y el fuerte impacto sacudió a los vecinos de esa zona, muchos de los cuales ya venían denunciando estas prácticas juveniles sin éxito.

La asistencia médica no pudo evitar que el chico muriera y al otro día la comunidad entró en conmoción, sobre todo porque se trata de una familia conocida y querida en la zona.

Hoy, desde distintos sectores esperan que el triste episodio sirva para abrir un “debate serio y medidas concretas”, apuntaron desde algunas asociaciones.

El tema ya había surgido de la gente como uno de los problemas principales en las reuniones que la comunidad pidió tener con efectores de Seguridad el año pasado, tras el brutal asesinato de doña Kita Torfe.

Hay quienes sostienen que Tupungato es un departamento “fierrero”. Sin embargo, esta es una problemática que afecta a toda la provincia. A principios de enero, tres chicas resultaron lesionadas cuando fueron atropelladas por “corredores” en Maipú.

"Es una problemática social en la que deben involucrarse los padres y distintos actores. Hay sitios preparados para estas carreras, que responden a las medidas internacionales de protección, pero en la vía pública corren riesgos los competidores y cualquier peatón o conductor que pase por el lugar", remarcó José Luis Puga, de la Policía Vial del Valle de Uco.

El comisario explicó que es un delito espontáneo y dinámico. “Hay lugares donde suelen reunirse en la región, pero van mutando. Sabemos que en Tupungato han hecho un grupo de Whatsapp para avisarse y evadir nuestros controles”, apuntó.

A principios de 2016 la Policía Vial logró desbaratar una gran picada clandestina en un punto rural de San Carlos. Allí hubo detenidos y multas por doquier. “Pero la cuestión continúa”, dijo Puga.

Desde la comuna, dijeron que esperan que la colocación de las tachas refractivas en la Ciudad disminuya este accionar.

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