LiEl Gobierno de Perú autorizó la intervención de las Fuerzas Armadas en la provincia de Islay, de la región de Arequipa, al sur del país, donde ayer murió un policía herido en las protestas contra el proyecto cuprífero Tía María, de la minera mexicana Southern Copper, aunque el Ejecutivo insistió en su intención de resolver las diferencias a través del diálogo.
El Ministerio del Interior autorizó la participación de los militares “en apoyo de la Policía Nacional, con el fin de asegurar el control y el mantenimiento del orden interno”. Las Fuerzas Armadas también deberán “evitar actos de violencia o cualquier otro acto ilícito que se pudiera cometer con ocasión de las movilizaciones” en Islay, donde las protestas contra la actividad minera derivaron en un paro que ya lleva 48 días.
El policía Alberto Vásquez murió tras sufrir una fractura en el cráneo y se encontraba conectado a un respirador artificial y sedado. Es el primer agente fallecido en el conflicto tras los dos civiles muertos en los últimos días, uno de ellos por impacto de bala.
La minera mexicana Southern Copper anunció el 27 de marzo que seguirá desarrollando el proyecto, pese a lo que calificó de “terrorismo antiminero”. Southern contempla la inversión de unos 1.200 millones de dólares para la construcción de Tía María, cuya producción estimada es de 120.000 tn métricas anuales de cátodos de cobre.
