Mientras todo parecía indicar que entre el gobernador Francisco Pérez y el vicegobernador, Carlos Ciurca, habían vuelto a la calma y el entendimiento, ráfagas de discordia volvieron a azotar esa relación, al menos en materia de seguridad. Es que horas antes de que Diputados tratara la declaración de la emergencia en seguridad pública, el mandatario relativizó su utilidad y fustigó a los legisladores.
Durante la entrega de patrulleros esta mañana en Guaymallén, Pérez se mostró muy contrariado con el tema y admitió que pretendía una ley “con herramientas para llevar adelante”.
“El proyecto de ley de emergencia más que una ley es una declaración”, empezó, tajante. Y, en diálogo con la prensa, siguió: “Tenemos expectativas de que, si es un paso previo para que después se sancionen otras leyes como las que mencionan que están en la Bicameral, seguramente vamos a acompañar y estamos interesados en que así se haga”.
Pero advirtió: “Si esto queda solamente en una letra muerta de un proyecto de declaración y después no se continúa el trabajo legislativo me parece que carece de sentido”, con lo que le restó importancia al peso político de la declaración per se, que impulsó Ciurca hace un mes a través de las redes sociales.
Fiel a su estilo temperamental, Pérez fustigó a los legisladores. “En vez de fijarse tanto en lo que hace el gobernador, que algunas cosas las hará bien, otras mal y otras quedan por hacer, que hagan cosas por la comunidad aquellos que tienen la obligación de legislar”, disparó.
Y cerró: “Hay que preguntarles a los que votan la ley, pregúntenle a los legisladores por qué no se sanciona la ley de educación que hace tres años está en la Legislatura”.