Paso de Las Leñas, prioridad

El Corredor Bioceánico Las Leñas emerge con un gran objetivo para el desarrollo de la provincia de Mendoza, capaz de reposicionarla en su papel de gran puerta de la Argentina con los mercados de la Cuenca del Pacífico. Pero ello requiere de un liderazgo político que esta provincia ha perdido durante la última década. La prueba de esa falta de liderazgo es el notable avance logrado por la provincia de San Juan con el paso de Agua Negra.

El paso de Agua Negra tiene muchas desventajas respecto del paso de Las Leñas. El cuadro adjunto entrega los detalles, pero el dato saliente es la diferencia de altitud: para cruzar por Agua Negra será necesario trepar hasta más de 4.000 metros snm, mientras que el paso de Las Leñas tendrá una cota máxima de 2.200 metros.

Para el transporte internacional de carga pesada, esta diferencia de altitud es decisiva porque implica una brecha irremontable de costos de combustible, desgaste de vehículos, seguridad de cargas y pasajeros y, sobre todo, transitabilidad durante el año (el actual Corredor por Cristo Redentor, con una altitud máxima de 3.200 metros, se cierra 40 días al año y causa 100 víctimas por año, sólo en el tramo argentino).

Teniendo en cuenta una brecha tan notable, de 2.000 metros de altitud, entre Las Leñas y Agua Negra: ¿por qué en los últimos diez años Agua Negra ha avanzado tanto y Las Leñas no ha avanzado nada?

Desde 1999, gracias a los estudios de Vialidad nacional de Argentina y del Ministerio de Obras Públicas de Chile, se conocen las ventajas del paso Las Leñas. Sin embargo, este corredor no ha podido concretarse en nada. En cambio, el corredor por Agua Negra ya ha logrado realizar grandes inversiones en las rutas de aproximación, incluyendo puentes enormes y costosos, terraplenes, alcantarillados y otras obras de arte. Ya se han invertido más de 200 millones de dólares en esas obras. Además, ya se ha logrado la financiación por parte del BID de los 1.500 millones de dólares que faltan. Como el dinero ya está conseguido, las obras se licitarán en 2017 y la construcción comenzará en 2018.

¿Y Las Leñas? Todavía nada. Desde el empalme de la ruta 40 con la ruta provincial 220, en El Sosneado, ¡todavía no se ha pavimentado un solo kilómetro! No están teminados los proyectos y tampoco se ha conseguido la financiación.

¿Cómo se explica que el paso peor tenga tanto avance, y el paso mejor, nada?

La diferencia es el liderazgo. La provincia de San Juan ha tenido un líder notable en José Luis Gioja. A través de su esfuerzo, la provincia norcuyana ha logrado avances extraordinarios para poner en marcha este proyecto. Como ha señalado el embajador José Octavio Bordón, San Juan ha logrado revertir sus desventajas competitivas y, hoy por hoy, lidera los proyectos de inversión en mejoras de la infraestructura de integración física de la Argentina con Chile y la Cuenca del Pacífico.

Mientras tanto, la Provincia de Mendoza asumió una actitud pasiva que se hace difícil de comprender. ¿Qué han hecho nuestros gobernadores durante los últimos diez años? ¿Acaso se focalizaron en otros grandes proyectos? Miramos el escenario y sólo vemos obras muy menores, como los nudos de Costanera y el trébol de Paso y R40 en Maipú. Y la interminable doble vía a Tunuyán, ¡obra de 60 km iniciada hace 20 años!

El corredor por Las Leñas es vital para Mendoza para avanzar hacia un desarrollo territorial más armónico. Con esta obra se va a revitalizar el sur provincial y el Valle de Uco. Además, se van a incorporar a la producción 5.000 km2 de territorio que, hasta ahora, están aislados y desaprovechados.

Paralelamente, el corredor por Las Leñas va a aliviar la sobrecarga que actualmente sufre el paso Cristo Redentor. Esta ruta ya no va a estar colapsada por camiones. Se va a recuperar este territorio para un desarrollo más amplio y diversificado, con posibilidades para la agricultura y el turismo. Se va a poder realizar el gran parque público del borde ribereño del río Mendoza, lo cual va a mejorar la calidad de vida del millón de habitantes del Gran Mendoza.

El parque de borde río va a ser como el nuevo parque General San Martín, lugar abierto para todos, para compartir momentos de descanso con familia y amigos en medio de la naturaleza. Ello se potenciará con la creación del departamento Cordillera, o Alta Montaña, para focalizar a su gobierno municipal en el desarrollo turístico del borde río, con inversiones en seguridad, instalaciones y equipamiento para ofrecer una alternativa atractiva para los mendocinos y los turistas.

Hace cien años, Mendoza tuvo un líder estadista, llamado Emilio Civit, que pensó la Mendoza del futuro, con el parque General San Martín, el Ferrocarril Trasandino y la modernización vitivinícola. ¿Tendremos hoy un nuevo estadista capaz de los nuevos desafíos?

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