Padres biológicos se llevaron a un bebé de la Dinaf

Durante una de las visitas que periódicamente tenían, los padres biológicos de un niño de un año y ocho meses, que estaba al cuidado de una familia temporaria, se lo llevaron.

Si bien hacía varios meses que los papás lo visitaban en una institución, sin inconvenientes, estiman que la cercanía del plazo que tiene la Dinaf para elevar un informe al juez puede haberlos llevado a tomar esta decisión.  Esperan que recapaciten y lo devuelvan pronto.

Mabel Vicario, titular de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia, explicó que en el marco de las medidas de excepción que llevan a apartar a un niño de su familia biológica, la ley establece que se debe procurar la revinculación. Esto, además de intentar revertir la situación de amenaza o vulneración de derechos que llevó a adoptar las medidas.

En este caso, los progenitores no tenían prohibición de acercamiento, por lo que lo veían una vez por semana en Avome (Asociación de Voluntarios de Mendoza), que funciona en un terreno contiguo al de la Dinaf y con la que trabajan en gestión asociada. Además, concurrían para recibir acompañamiento y orientación en el proceso.

Mabel Vicario comentó que la entidad tiene una salida por el Corredor del Oeste y que fue la que utilizaron los padres para irse corriendo con el pequeño (no por la guardia, que además tiene cámaras de seguridad).

Como hasta ahora la madre y el padre habían tenido un comportamiento muy adecuado durante las visitas, había personal de Avome observando cada tanto el encuentro. De ahí que los vieran salir, aunque no lograron alcanzarlos.

El niño llevaba un tiempo con una familia temporaria, parte de un programa que se implementó para evitar que los niños, -sobre todo los bebés y más pequeños- que son apartados de sus padres biológicos, estén en un hogar. Los interesados se inscriben y son evaluados y capacitados para recibir a ese chico por un tiempo.

Entretanto, se trabaja con la familia biológica, para ver si logran resolver la situación que dio origen al apartamiento del menor. Esto es precisamente lo que no habían logrado los papás de este niño de un año y ocho meses.

Vicario detalló que las medidas de excepción son por 90 días y pueden extenderse por el mismo plazo. Cuando se cumple el total de 180 días y no se ha logrado revertir el contexto de amenaza o vulneración de los derechos del menor, la Dinaf debe presentar un informe al juez sobre la situación de los padres y de la familia extendida (si abuelos o tíos pueden hacerse cargo del chico).

El magistrado es quien, de acuerdo a esta información, decide si declara la situación de adoptabilidad. La directora de la Dinaf estimó que la cercanía de cumplimiento de esos 180 días puede haber provocado que los jóvenes se desesperaran y tomaran la decisión de llevárselo.

Aunque saben que el niño está con sus padres, como parte del procedimiento, radicaron una denuncia en Fiscalía, que originó una averiguación de paradero. De todos modos, aclaró que los padres no van a quedar detenidos por esto, por lo que espera que lo piensen mejor y regresen con su hijo.